En el marco de la celebración del Día Internacional de la Mujer, que se celebra el próximo 8 de marzo, Save the Children ha presentado Silenciadas, una investigación sobre agresiones sexuales en la adolescencia que muestra cómo la construcción de la sexualidad está marcada por la desigualdad y afecta tanto a las chicas como a los chicos, aunque de manera diferente.
En 2022 se interpusieron en la Comunitat Valenciana 2.379 denuncias por violencia sexual, de las cuales 1.082, casi la mitad (un 45%) tenía como víctima a una persona menor de 18 años. De estas denuncias, el 85% eran niñas o adolescentes, por lo que ser niña vuelve a ser un factor de riesgo determinante para poder sufrir una agresión de este tipo.
“Desde que son pequeñas las niñas y niños están condicionados por los roles y estereotipos de género. En el caso de las niñas con las muñecas, los dibujos animados, los vídeos y programas de televisión, las redes sociales... todo las encamina a conseguir un modelo femenino de belleza y corporal que nunca se acaba de conseguir”, asegura Rodrigo Hernández, director de Save the Children en la Comunitat Valenciana.
En cuanto a los agresores adolescentes, del total de 501 agresores menores de 18 años condenados por delitos de violencia sexual en España, 56 fueron de la Comunitat Valenciana.
“La masculinidad también está condicionada desde la primera infancia con los propios juguetes y espacios de socialización como el recreo: fuertes físicamente, activos sexualmente, vivir situaciones de riesgo, alejarse de las emociones y con actitudes de control y dominación, que se confunden con protección o incluso con afecto”, señala Hernández.
La pornografía, profesora de sexualidad
Save the Children recuerda que el entorno digital es un espacio más en el que la infancia y adolescencia se desarrolla y la pornografía está también condicionando la forma en que niños, niñas y adolescentes se relacionan entre sí. Según el informe Desinformación Sexual de la organización, casi 7 de cada 10 adolescentes en la Comunitat Valenciana consumen pornografía de forma frecuente, y de media acceden a los contenidos sexuales por primera vez a los 12 años. Una pornografía que es de consumo masivo online, gratuita e ilimitada y sus contenidos están basados de manera mayoritaria en la violencia y la desigualdad.
Así, la pornografía muestra aspectos que los chicos y chicas pueden reproducir como la no necesidad de pedir consentimiento o la negativa del mismo por parte de los hombres, la ausencia de métodos anticonceptivos, la estigmatización de los cuerpos y cosificación como objeto de placer de la mujer o el establecimiento de roles desiguales: dominio (chicos) y sumisión (chicas).
Agresiones sexuales grupales
Save the Children analiza también en su informe aquellas agresiones cometidas en grupo, ya que son un delito cada vez más visible en la sociedad dada la gravedad de la violencia y la mayor difusión mediática. Según el Ministerio del Interior, el número de agresiones sexuales cometidas por más de una persona, independientemente de su edad, ha aumentado en los últimos años en más de un 64% en España. Sin embargo, todavía están lejos de las cifras de agresiones sexuales individuales, representando en 2022 un 4,2% del total de delitos denunciados por violencia sexual.
Si se analizan los datos disponibles en la en la Comunitat Valenciana, de 2017 a 2022 (último periodo analizado disponible) se produjeron 477 agresiones sexuales cometidas por dos o más personas.
En lo que respecta a la infancia y adolescencia que sufre estas agresiones, el Ministerio de Interior señala que el perfil de la víctima es el de una niña o adolescente sola, con una edad media de 15 años, cuyos agresores tienen una edad similar, se conocen con anterioridad (aunque sea de forma limitada) y el delito suele cometerse con penetración y violencia.
“Hay que tener en cuenta que muchas agresiones sexuales múltiples son grabadas o fotografiadas como señal de dominio y a la espera de un reconocimiento del grupo de iguales, lo que muestra de forma clara cómo afectan las nuevas tecnologías e Internet a la forma de relacionarse de niños, niñas y adolescentes”, afirma el director territorial.
Medidas para combatir este tipo de violencia
Save the ave the Children recuerda que, tal y como indica la Ley Orgánica de Protección Integral de la Infancia y Adolescencia frente a la Violencia (LOPIVI) aprobada hace ahora casi tres años, es necesario que el Gobierno desarrolle una legislación específica que despliegue medidas de prevención que contempla la ley como la educación afectivo-sexual o en un uso seguro y responsable de las nuevas tecnologías.
“La pornografía no puede ser la profesora de sexualidad de niños, niñas y adolescentes, igual que no podemos enseñar a conducir a adolescentes con videojuegos de carreras de coches. Por tanto, es fundamental implantar una educación afectivo-sexual desde edades tempranas para que niños y niñas puedan establecer relaciones más sanas y más igualitarias, así como dotarlos de herramientas para que puedan hacer un uso seguro de las nuevas tecnologías”, señala Hernández.
Además, cuando la violencia ya se ha producido, es necesario que niñas, niños y adolescentes que han sido víctima sean atendidos con las mayores garantías y respetando todos sus derechos. Para ello, Save the Children propone la formación inicial y constante de todos los profesionales del ámbito jurídico y la coordinación de todos los recursos existentes para atender a la infancia víctima, así como a los agresores adolescentes.
Casas de los niños
Save the Children apuesta también por continuar impulsando en la Comunitat Valenciana el modelo nórdico Barnahus (“casa de los niños” en islandés), un modelo de atención integral donde todas las instituciones que intervienen en un caso de abuso sexual infantil se coordinan y trabajan bajo el mismo techo para evitar la victimización secundaria.
“En la Comunitat Valenciana ya contamos con recursos para atender a la infancia que ha sido víctima de violencia sexual, como las cámaras Gesell o las SAANNA, que son un servicio específico de atención a víctimas de abuso sexual infantil. Sin embargo, es necesario dar un paso más allá con la especialización de juzgados y la implantación definitiva del modelo Barnahus en nuestro territorio. Por ello, es necesario que el Consell continue impulsando el modelo esta legislatura”, añade el director territorial de Save the Children.
Sobre Save the Children
Save the Children es la organización independiente líder en la defensa de los derechos de la infancia en todo el mundo. Trabaja en más de 115 países salvando vidas, protegiendo a los niños y las niñas y defendiendo sus derechos en el marco de la Convención sobre los Derechos del Niño de Naciones Unidas.
En España trabaja desde hace más de 30 años con programas de atención centrados en la infancia en riesgo de pobreza o exclusión social. Estos programas proporcionan una atención integral a los niños, niñas y sus familias para que la situación económica en la que viven no les impida disfrutar plenamente de sus derechos y puedan alcanzar el máximo de sus capacidades.