La delegada del Gobierno, Gloria Calero, lamentó este miércoles que en la Comunitat Valenciana han aumentado recientemente los delitos de odio, aunque “no es que sean desorbitados”, y ha llamado a no tener miedo a denunciar porque la Policía está “muy concienciada para castigar estos hechos”.
En rueda de prensa, advirtió de que se están produciendo situaciones que “desde hace años” no sucedían y ha garantizado que la Policía Nacional está pendiente de estas agresiones y Delegación mantiene reuniones periódicas con varias asociaciones para “ver cómo lo controlamos”.
“Parece mentira, parece que estoy en una pesadilla. Cuando era joven sí viví un acoso, un encarcelamiento.... Volver al siglo XXI y volver a aquel aumento de delitos de odio por el mero hecho de ir con otras personas o por unos sentimientos, me parece una barbaridad”, ha manifestado tras un acto para destacar los compromisos del Gobierno.
Ante esta situación, Calero ha hecho un llamamiento para que las víctimas no tengan miedo de denunciar: “La Policía está preparada para acogerlas y no permitir que quede impune esta gente que se atreve a semejante barbaridad”.
Al respecto, desde la Delegación informan a elDiario.es de que solo en el último mes se han registrado ocho denuncias en la Comunitat Valenciana por agresiones a personas LGTBI, “un aspecto que se ha tratado en varias reuniones con el colectivo Lambda para abordar estas cuestiones, reforzar la seguridad y tramitar las correspondientes denuncias”.
Entre las causas del repunte, destacan una mayor predisposición a la hora de denunciar estos hechos y por tanto un consiguiente incremento en las denuncias formuladas; una mayor visibilidad y concienciación social de repulsa hacia estas actitudes; el que estos hechos se identifiquen y registren como “delitos de odio”, sin quedar subsumido en otros episodios delictivos; la implicación de las fuerzas de seguridad para identificar este tipo de delitos.
Según las mismas fuentes, más del 80% de los hechos se han perpetrado en vía pública: “El perfil de los presuntos autores resulta heterogéneo y de difícil vinculación con ningún grupo ideológico o tribu urbana. Solo en uno de los 8 casos denunciados el autor está relacionado con el entorno de la extrema derecha”.
La solución de la Delegación y la Policía para hacer frente a estos fenómenos violentos pasa por “un incremento de presencia policial, tanto uniformada como de paisano, propuestas de infracciones y sanciones administrativas, concienciación a los establecimientos hosteleros de la importancia de cumplir las normas horarias y de convivencia cívica, labor informativa y de sensibilidad con las asociaciones vecinales, controles de alcoholemia en las proximidades de estas concentraciones, así como del seguimiento en redes sociales de grupos, personas o mensajes que pudieran encuadrarse en cualquiera de las formas de los delitos de odio, especialmente los que pudieran realizarse por grupos de ideología extrema”.
Además, los delegados de Participación Ciudadana de la Policía Nacional de la Comunitat Valenciana están realizando jornadas de concienciación para Policías en activo (Jornadas TAHCLE) en el mayor número de plantillas. En concreto, “las últimas fechas se han realizado en València (14, 15 y 16 de junio), y una vez finalice el verano se tienen programadas más jornadas de concienciación”.
La Jefatura de Policía está ultimando también la organización de unas jornadas, de las que se ha informado y se tiene la intención de realizar el ofrecimiento a los colectivos vulnerables que potencialmente pueden ser destinatarios de delitos de odio, para su presencia y participación en los próximos meses con la finalidad de mantener el acercamiento, conocimiento y mejora en la relación y actuación de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad ante esta modalidad delictiva.
Hace unas semanas, la sección de delitos de Odio de la Fiscalía de Valencia abrió cuatro investigaciones en menos de dos semanas por presuntas agresiones homófobas registradas en la ciudad de València. También analiza dos denuncias más en un año en el que los sucesos de este tipo se han disparado.
Se trata de los últimos incidentes registrados en València, en el antiguo cauce del Túria y en Plaza de Honduras, que coincidieron con el asesinato de Samuel, un joven de 24 años que recibió una paliza en A Coruña propinada por un grupo de personas en un acto que se ha considerado de homofobia.
Según los datos del Ministerio del Interior, anunciados la semana pasada, en 2020 se registraron en España hasta 1.401 denuncias por delitos de odio frente a los 1.706 del año anterior, aunque estos datos están desvirtuados por el confinamiento y las restricciones. El racismo se sitúa como la primera causa de los delitos de odio con 326 denuncias registradas, por delante de la ideología con 326.
En cuanto a las denuncias interpuestas a nivel nacional por víctimas de delitos de odio por su orientación sexual, durante el año pasado no variaron apenas en cifra y se mantuvieron altas a pesar de la pandemia, de 278 en 2019 a 277.