La artista Paula Bonet se quedó prendida con un libro. Se trató de la obra “Anne Sexton. Un autoretrato en cartas” (Linteo), de Linda Gray Sexton, la hija de Anne Sexton. Tanto, que gracias a esa lectura la poetisa Anne Sexton será la protagonista de su nuevo proyecto editorial: 'La sed', que saldrá a la luz en octubre y en el que está trabajando la creadora. Un libro que tendrá su antesala en forma de exposición en la galería Pepita Lumier de Valencia.
Con el título 'Y llegas a perforarme en el blanco de mi sed', Bonet presentará esta especie de prólogo en forma de su exposición de su libro este viernes. Aunque el público no podrá disfrutar de ella hasta el próximo 4 de junio. Una muestra en la que la artista de Vila-Real quiere “dar voz” a la lucha contra el machismo y el patriarcado.
Así, el propósito de la pintora es “traducir en imágenes” el acercamiento a la obra de Sexton, compuesta, a su juicio, por “unos poemas bañados de dramatismo, llenos de sangre, huesos, picos, sombras y alguna que otra almeja consumida fuera de temporada”. En su primera muestra individual en Valencia, Bonet ha elaborado “imágenes dibujadas con puntas de acero, grabadas a golpe de baño de ácido y estampadas sobre el papel a fuerza de ser reventadas contra un tórculo”, según ha afirmado a Europa Press. Los pinceles y el aceite del óleo son los protagonistas de su nuevo trabajo, y con los que se sumerge de lleno en los ácidos del grabado.
En su nuevo proyecto editorial, los lectores encontrarán “la voz de muchas mujeres que encontraron respuestas volcándose en un trabajo creativo que las alivió; mujeres que intentan explicarse en un mundo de hombres, luchando contra el patriarcado y la discriminación del machismo”. Es decir, como hizo la propia Anne Sexton. De hecho, Bonet reconoce que se siente identificada con ellas.
“Parece que hayamos hecho mucho trabajo, y lo hemos hecho, pero todavía falta muchísimo; como autora sufro que en los medios o en presentaciones en congresos a los hombres de les presenta a través de su obra y a mí como un trozo de carne. Parece mentira que en un país como el nuestro aún se nos trate como un objeto y acabemos excusándonos y casi dando las gracias por conseguir ciertos objetivos cuando nadie nos ha regalado nada”, ha criticado. Cultura contra la lacra del machismo.