La otra cara oscura del pufo de Bancaja en México: Grand Coral arrasó un paraje natural junto al mar

El proyecto Grand Coral impulsado por Bancaja y que generó un quebranto a la entidad y a Banco Valencia de 750 millones de euros acabará en España en un juicio a 48 personas -entre ellas el expresidente de la Generalitat y expresidente de Bankia José Luis Olivas- por delitos de apropiación indebida, administración desleal y blanqueo de capitales. Pero este megaproyecto urbanístico no solo ha generado problemas financieros sino que en México ha supuesto un problema medioambiental al arrasar miles de metros cuadrados de humedales junto al mar. 

Tanto el Senado como las autoridades municipales y el Estado de Quintana Roo han denunciado las actuaciones urbanísticas tanto en la construcción de las distintas urbanizaciones del proyecto como el campo de golf Grand Coral en primera línea de playa que han acabado con miles de metros cuadrados de manglar, terrenos que cubren de agua las grandes mareas, lleno de esteros que lo cortan formando muchas islas bajas, donde crecen los árboles que viven en el agua salada.

Pero toda la agresión urbanística no terminó en la construcción, sino que años después y según denuncia la prensa local, desde el proyecto Gran Coral se continúan depositando escombros en el humedal para seguir con la ocupación para urbanizar. Esta actuación ha provocado que el departamento de Medio Ambiente del municipio de Solidaridad haya sancionado a Grand Coral, denuncia que se suma a los tres millones de pesos de multa que le fueron impuestos en 2014 por daños a la flora y la fauna de la zona.

Grand Coral Riviera Maya y el campo de golf ocupan más de 300.000 metros cuadrados de superficie total y fueron clausurados temporalmente por la administración mexicana por su afectación medioambiental. Aún así, el impacto sobre el territorio continúa siendo muy grande con el vertido de escombros en humedales y la contaminación que generan los turistas. 

Estas informaciones y vídeos demuestran que el impacto de la inversión de Bancaja con los empresarios Juan Vicente Ferri y José Salvador Baldó fue además de un fiasco económico, que Bankia no está sabiendo rentabilizar al vender los activos por debajo de su precio, un atentado medioambiental que todavía hoy general daños en el pasaje de Riviera Maya.