Jorge Ignacio Roca, el facturero de la trama que saqueó la depuradora pública de València, ha vuelto a señalar a su socio, el empresario Joan Borràs Alabern, como la persona que le introdujo en la conjura corrupta. Roca, en una declaración con tono altivo durante la primera sesión del juicio por el fraude con el IVA por la que ha sido incluso reprendido por la magistrada, ha lamentado que su exsocio “nunca ha sido enjuiciado” por el descomunal saqueo, que se ha saldado con largas penas de prisión confirmadas por el Tribunal Supremo.
El empresario Jorge Ignacio Roca, que estuvo fugado en Moldavia, ha sido condenado a seis años y un día de prisión por la Audiencia Provincial de València, a seis meses de prisión por la Audiencia Nacional por un delito de blanqueo de capitales, y a dos años de prisión por simular una operación comercial para la exportación de 10.000 taxis a Pakistán.
¿Cómo llegó Roca a ser el facturero de la trama corrupta? El acusado ha contado que fue el empresario José Luis Sena quien le propuso, a través de su socio Joan Borràs, trabajar para la empresa pública valenciana. “Todos esos años estuvimos con la promesa de que el Partido Popular nos estaba protegiendo y amparando”, ha asegurado.
El empresario catalán que introdujo a Roca en la trama, según la versión del facturero, era el encargado de supervisar la extracción de lodos presuntamente fraudulenta de la depuradora de Pinedo. Borràs declaró como testigo, a pesar de las graves acusaciones sobre su presunta implicación en el cobro de comisiones, y ha sido señalado en repetidas ocasiones por Roca como el enlace con la trama.
“Joan Borràs es administrador de la empresa Adobs Organics, cobraba tres euros por tonelada de lodo y nunca ha sido enjuiciado”, ha lamentado este lunes en la primera sesión del juicio por el presunto fraude en el IVA su antiguo socio, detenido en Moldavia tras estar fugado durante años. En el transporte de los lodos, “Borrás se ponía de acuerdo con Sena en lo que cobraban ellos y me venían a mi”, sostiene el facturero de la trama. “Cuando Borràs se fue en 2009, yo cobraba más”, ha insistido Roca. Los sobres con el dinero en negro eran entregados al empresario José Luis Sena en València o a Joan Borràs en Barcelona, según ha rememorado Roca en el juicio.