La autorización de la Comisión Europea para que la propiedad de los platós de Ciudad de la Luz vuelva a la Generalitat Valenciana, mediante una dación en pago, incluye el rodaje de películas tras un periodo de años aún por negociar y siempre que sea por parte del sector privado.
Así lo ha explicado el president de la Generalitat, el socialista Ximo Puig, al término de un consejo de administración de Ciudad de la Luz en el que ha informado de que la dirección general de la Competencia de la Comisión acepta liquidar la propia Ciudad de la Luz a través de la cesión de activos y pasivos a la Sociedad pública de Proyectos Temáticos de la Comunitat (SPTCV), dependiente del Consell.
Para el president, se trata de “una muy buena noticia para Alicante y para la Comunitat” ya que los valencianos vuelven a ser los propietarios de unas instalaciones que han costado 343 millones de euros de dinero público y que, debido a la gestión del anterior Consell del PP, estaban destinadas a ser “regaladas” a un comprador y sin condiciones.
Puig ha explicado que, debido a que la deuda de 264 millones de euros de Ciudad de la Luz era con la Generalitat Valenciana, la Comisión ha aprobado la dación en pago bajo tres condiciones, que además serán objeto de negociación en las próximas semanas porque su intención es suavizarlas.
Estas tres premisas son que durante 15 años los platós y resto de edificios no puedan dedicarse a actividades no económicas, que estos usos sean supervisados por la Comisión y, la tercera, que tras ese plazo únicamente pueda haber actividad lucrativa mediante una venta al sector privado en condiciones de libre competencia.
El jefe del Consell ha insistido en que lo importante es haber revertido la propiedad de este patrimonio, que hace unos años estaba destinado a malvenderse, y ha recalcado que ahora se negociará para rebajar los 15 años propuestos y flexibilizar las posibilidades de actividad.