“El titular de la calle es uno, ni dos, ni tres, ni veinticinco titulares tiene una calle”. De esta manera justificaba el concejal de extrema derecha de Vox en Montserrat, Carlos Martínez, responsable de Patrimonio, durante el último pleno municipal la retirada de las placas de diversas calles que pretendía dar una mayor relevancia a personajes femeninos de la historia con las que se daba una 'cotitularidad'. Esta iniciativa, impulsada a través de un proyecto escolar, pretendía así compensar de cierta forma el déficit de nombres femeninos en la localidad que únicamente tenía uno, el dedicado precisamente a Nuestra Señora de Montserrat
“La vía pública está para dar claridad y certidumbre a la ciudadanía. Lo que estaba instaurado lo único que hacía era confundir a la ciudadanía con hasta tres nombres para una sola calle”. Esta referencia se hacía por ejemplo para la plaza Cervantes, que junto al nombre oficial tenía dos placas con su nombre histórico 'Antigua replaceta de la Font' y Sor Juana Inés de la Cruz.
Pero a continuación Martínez soltó la carga de profundidad señalando que “no entendemos la vía pública para jugar al adoctrinamiento con carácter político y no oficial por el simple capricho ideológico y en contra del interés común y público”. Entre los nombres señalaba algunos como Margarita Chirgu que señalaba como “Margarita 'la roja'”, María Viñals “'la marquesa roja” o Mercé Rodoreda de la que destacaba que era insigne escritora en “lengua catalana”. Vox sentenciaba que si querían nombres de mujeres en las calles “han tenido 20 años para hacerlo” en referencia al periodo de gobierno de la izquierda.
Desde que Vox alcanzó el gobierno de la localidad de Montserrat tras una moción de censura en la que apoyó al nuevo alcalde del PP su gestión ha estado salpicada con diversas polémicas. Entre ellas destaca la censura de la presentación de un libro-disco en valenciano de un autor local o también la censura en la biblioteca de la revista Saó, la decana de las publicaciones en valenciano.