Pese a que por primera vez en las fiestas de Algemesí se han dejado de matar becerros tras las protestas de los animalistas, el maltrato animal no habría terminado según la plataforma 'La Tortura No Es Cultura' (LTNEC) y la Asociación de Veterinarios Abolicionistas de la Tauromaquia y el Maltrato Animal (AVATMA).
Así estos colectivos han denunciado un sufrimiento y un “calvario interminable” de un animal en las novilladas organizadas ahora tras ser descabellado cinco veces “infructuosamente” y después apuntillado, tras lo cual fue “dejado a merced del público durante una interminable agonía” ya que todavía respiraba, durante esos momentos los niños lanzaban spray de nieve sobre el novillo moribundo como “divertimento”.
Ante esta situación las plataformas han anunciado su intención de denunciar al Ayuntamiento de Algemesí, a los organizadores de la novillada y a la Consellería de Justicia por maltrato animal. Según explica AVATMA, el descabello, es una espada que lleva a diez centímetros de su punta un tope, y que una vez introducido entre la primera y segunda vértebra cervical secciona la médula espinal, dejando al animal tetrapléjico. Además, explica que si se produce la muerte al instante, no se tiene que utilizar la puntilla, como se hizo en este caso en Algemesí. No obstante, indican que la puntilla tampoco provoca la muerte instantánea y recuerdan que la Unión Europea prohibió hace años la puntilla como método de sacrificio por ser “cruel”.