Las lluvias de los últimos han sentado especialmente mal algunos cultivos de la provincia de València. Seis días de lluvias han arrojado unas pérdidas que, en un primera valoración, la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA), estima en 70 millones de euros, aunque advierten que podrían llegar a los 120 millones, y que han afectado fundamentalmente a las comarcas de la Ribera, la Costera, la Safor, la Foia, el Camp de Túria y l'Horta.
Las producciones agrícolas más castigadas son los cítricos, el caqui y las hortalizas. Solo las pérdidas previstas por el colectivo agrario en cítricos, principalmente en clementinas aunque también en naranjas, están valoradas en una horquilla entre 50 y 100 millones debido a la afección directa sobre una cantidad que oscila entre 250.000 y 500.000 toneladas.
Las pérdidas en el caqui, de acuerdo con las estimaciones de AVA-ASAJA, se situarán en un rango entre 5 y 8 millones de euros. Un total de 20.000 a 40.000 toneladas de caquis sufrirán daños irreversibles a causa de la inundación de los campos. Esta merma se suma al descenso del 35% de la producción valenciana de caqui que ya habían ocasionado las heladas primaverales y, sobre todo, el pedrisco de julio.
En cuanto a las hortalizas, la incidencia del agua acumulada durante esta última semana calcula el colectivo que supondrá unas pérdidas de 1 a 3 millones de euros, mientras que la producción perjudicada se situará entre 2.000 y 4.000 toneladas. Los cultivos que salen peor parados son las cebollas, coles, coliflores y alcachofas. La lluvia también ha retrasado la recogida de la chufa y, a su vez, la posterior plantación de otras producciones hortícolas en esos mismos campos.
Finalmente, AVA-ASAJA cifra entre 10 y 15 millones de euros el alcance de los daños en las infraestructuras agrarias, tales como invernaderos, muros, caminos rurales, canalizaciones, etc.
La Unió más cauta
Desde la Unió de Llauradors se ha hecho una valoración similar en cuanto a comarcas afectadas y el tipo de cultivos, no obstante se ha querido evitar cifrar la cuantía de daños afirmando que sería “totalmente aventurada e imposible de realizar porque no hay datos objetivos, ahora sería una mera suposición”.
Así, aunque consideran que las lluvias en conjunto servirán para ahorrar riegos, recargar los acuíferos, llenar las cabeceras de los ríos, limpiar los árboles para evitar posibles plagas, aumentar el calibre de la fruta y regenerar los pastos, también se señalan los daños del agua embalsada. Así señalan que hay 4.500 hectáreas con agua embalsada, casi 3.000 en la Safor y el resto en Ribera Alta y Baixa y Marina Alta, la mayoría de cítricos y una pequeña proporción de hortalizas, “donde si permanece más días podría originar problemas de muerte del arbolado por asfixia radicular”. En algunos campos, sobre todo situados en los marjals de Tavernes y Gandia, se puede dar por pérdida la cosecha de este año.
Ayudas del Consell
Desde la Generalitat ya se han anunciado ayudas a las zonas afectadas por estas lluvias. Así la vicepresidenta Mónica Oltra, en una visita este martes a Alzira, ha informado que el Consell aprobará, previsiblemente la próxima semana, un decreto de inicio de actuaciones para paliar los daños producidos por las lluvias.
En este sentido, ha destacado que el Consell “actúa, una vez más, en un tiempo récord” para atender los daños que hayan podido sufrir los municipios afectados por los episodios de lluvia de la última semana. El objetivo es tratar de conseguir “lo antes posible la vuelta a la normalidad de las zonas afectadas por el temporal en toda la Comunitat Valenciana”, ha apuntado.