Sudáfrica es el segundo exportador mundial de cítricos en fresco por detrás de España y su naranja, según los datos de la Unió de Llauradors, entra en a un precio cada vez más barato a pesar de la distancia existente entre uno y otro país.
En números apuntan que los precios han bajado un 30%, pasando de los 1,40 euros/kg de 2012 a los 1,09 euros/kg de 2016, “una tendencia claramente decreciente campaña tras campaña”. Explican desde el colectivo agrario que los motivos principales pueden ser un menor coste de producción al tener explotaciones cada vez más grandes y modernizadas, y la disminución progresiva de los aranceles por parte de las autoridades comunitarias “que no olvidemos desaparecerán definitivamente dentro de nueve años tras el reciente acuerdo entre la UE y los países del África Meridional y aprobado por el Parlamento Europeo en septiembre de 2016”.
La Unió considera estos datos “muy peligrosos” para el futuro de los productores valencianos de cítricos en el caso de continuar esta línea, pues puede situarse el precio unitario de entrada de los cítricos sudafricanos a niveles similares a los que llegan los nuestros en los mercados europeos y por tanto las cotizaciones de la primera parte de la campaña -que es cuando mayor competencia tenemos con ellos- podrían marcar una tendencia para el resto de la temporada. Otro hecho a destacar es que ese precio tan bajo se deba también a una reducción de la calidad de la fruta enviada, de segunda o tercera categoría, “lo que podría suponer también un claro perjuicio para los productores valencianos de cítricos”.
El mismo estudio habla también de las cifras importadoras de la Unión Europea. Así los envíos de naranja sudafricana a los Países Bajos han crecido un 27% tras pasar de 263.181 Tn en 2012 a 334.001 Tn en 2016, al Reino Unido han aumentado un 9% y a Portugal un 57%. Así en el global Holanda, Reino Unido y Portugal coparon el pasado año la entrada de cítricos sudafricanos a la UE con el 81% del total (el 50% a través del puerto de Rotterdam).
Por el contrario, han descendido fuertemente en España desde que en 2014 descartaron su entrada por nuestros puertos para evitar inspecciones más rigurosas, “aunque no significa que en un mundo tan globalizado no tengamos presencia de naranjas sudafricanas en los lineales de las tiendas y supermercados como se ha podido comprobar”.