Unos vienen de zonas castellanohablantes, otros de zonas valencianohablantes. La Conselleria de Educación, Investigación, Cultura y Deporte de la Generalitat Valenciana anunció a principios de este mes su intención de convocar ayudas económicas para aquellos centros públicos que participen de intercambios con otros centros en zonas con predominio lingüístico distinto. La propuesta, que tiene el objetivo de favorecer la cohesión lingüística del territorio y dar la oportunidad a los estudiantes de llevar a cabo actividades de uso real de la lengua, llega en mitad de una precampaña con constantes acusaciones de la derecha por “pancatalanismo” y supuesto adoctrinamiento en la enseñanza pública.
La iniciativa contará con una partida presupuestaria máxima de 20.000 euros a repartir entre los centros públicos participantes, otorgándose en régimen de concurrencia competitiva. Estas ayudas económicas alcanzarían como máximo los 1.000 euros por caso y deben servir para costear los gastos relacionados con el intercambio –el transporte, la manutención, el hospedaje y las actividades del estudiante-. De esta forma, afirman desde conselleria, “los centros públicos de territorios de predominio lingüístico castellano podrán realizar proyectos que tengan como finalidad el intercambio y la convivencia de su alumnado con alumnado de centros de territorios de predominio lingüístico valenciano”.
Ambas escuelas deberán validar el proyecto, el cual deberá incluir datos sobre aspectos sociolingüísticos del alumnado, la metodología empleada, planificación de todas las actividades y un presupuesto detallado de gastos. Será una comisión técnica de valoración la que clasificará las propuestas mediante un sistema de puntuación –con un máximo de 100 puntos- dependiente de una serie de criterios como el número de alumnos participantes o la distancia entre las poblaciones de los centros participantes.
Objetivo discriminación lingüística cero
Jaume Fullana, director general de Política Educativa, afirma que desde el mundo educativo siempre se ha querido recuperar el proyecto, ya que es una experiencia “que aporta valor respecto a las actitudes lingüísticas y por ello lo hemos querido recuperar”. La diferencia entre la actual propuesta y la que ya existía hasta 2008 estriba en la aportación de recursos y en un equipo de asesores de educación plurilingüe, que asegurarán que los docentes tengan una formación adecuada.
“Nosotros queremos para nuestro territorio a una sociedad que eduque en las máximas competencias plurilingües para el alumnado. No se puede fomentar el monolingüismo de ninguna de las maneras. El objetivo final es que en este país no tengamos ningún tipo de discriminación y por tanto el hecho de que un alumno adquiera mayor competencia lingüística en diversas lenguas siempre será un factor positivo”, afirma Fullana.
La aceptación general de la propuesta ha sido muy positiva, declara el director general, y asegura que no les constan quejas de ningún tipo por parte de las asociaciones de padres y madres. “Hay sectores que tienen intereses especiales en magnificar cualquier dificultad que aparezca, pero el sector educativo continúa con su labor, cada vez más alejado de estas polémicas interesadas”, asegura.