Prácticamente coincidiendo con la fecha del primer acuerdo y un mes y medio después de las elecciones autonómicas, las tres fuerzas de izquierdas en la Comunitat Valenciana han firmado el acuerdo con el programa de Gobierno. Ximo Puig, Mónica Oltra y Rubén Martínez Dalmau, líderes del PSPV, Compromís y Unides Podem-EUPV, han suscrito este miércoles en el Castillo de Santa Bárbara de Alicante el segundo acuerdo para un gobierno progresista.
Aunque ha cambiado la localización, como símbolo de la intención de “vertebrar” el territorio autonómico, el documento y el gobierno seguirán con la referencia al Jardín Botánico de Valencia, dónde se firmó el primero. El segundo acuerdo del Botánico, o Botànic 2, avanza en los ejes que se propusieron en el primer Gobierno progresista tras 20 años del PP. En 2015, han reconocido en reiteradas ocasiones sus líderes, se encontraban en una situación de emergencia social y la prioridad, lo urgente, era el rescate de las personas más vulnerables. Superada esta fase, aunque los dirigentes reconocen carencias, el segundo acuerdo progresista, que esta vez integra a Podemos y Esquerra Unida en el Ejecutivo bajo la coalición Unides Podem, plantea un escenario más ambicioso.
Este acuerdo se estructura en seis ejes, uno más que el anterior y con más objetivos: Transición ecológica y lucha contra la emergencia climática, con 12 medidas; Feminismo, diversidad e igualdad de trato, con 13 medidas; Servicios públicos para continuar rescatando y cuidando de las personas, con 42 compromisos; Ocupación, modelo productivo e innovación, con 39 medidas; Calidad democrática y buen gobierno, con 16 medidas; y Fiscalidad progresiva, financiación justa e intereses valencianos, con 10 compromisos.
El president de la Generalitat, Ximo Puig, ha agradecido a la ciudadanía la oportunidad para seguir trabajando desde el Gobierno autonómico y ha calificado el acuerdo como “integrador, inclusivo y para todo el pueblo valenciano”. La vicepresidenta, Mónica Oltra, ha considerado que es un acuerdo exportable y admirable a otros espacios, y ha asegurado que trabajarán “con la cara bien alta y con orgullo defender los valencianos”.
El contrato para los próximos cuatro años asume los retos que la ciudadanía reivindica en las calles y en las urnas: el feminismo y el ecologismo, ambos como luchas transversales, no departamentos aislados. Así, el preámbulo del documento expone: “Promovemos una transición ecológica, descarbonizada y verde de nuestro territorio protegiendo los recursos naturales y luchando contra la emergencia climática. Caminamos hacia una sociedad más igualitaria desde un feminismo transversal. Profundizamos en un nuevo modelo económico equitativo e innovador que permita un horizonte de vida digna para los trabajadores y trabajadoras y nos comprometemos a impulsar nuestra cultura como herramienta de transformación. Apostamos por unos servicios públicos de calidad como garantía de derechos y apoyo para todas las familias y continuamos reconociendo y ampliando derechos abogando por la diversidad ante el odio. Defendemos aquello público desde la ambición de una administración eficiente, tecnológicamente avanzada, participativa y próxima a la ciudadanía. Seguiremos exigiendo en el gobierno central una financiación justa y unas inversiones dignas”. Unos objetivos nada desdeñables.
En la redacción de este acuerdo han participado miembros de todos los partidos, algunos destacados exdiputados como Fabiola Meco (Podem), politólogos y asesores con experiencia en gobiernos municipales o autonómicos, como Carlos Villodres, Natxo Serra y Enric Juan, de Compromís; Jaume Giner, de Esquerra Unida; María Diago y Blanca Martín, responsable de Ocupación del PSPV y Arcadi España, jefe de Gabinete del president Ximo Puig. Todos los redactores han trabajado de cerca durante esta legislatura, por lo que conocen las carencias y ambiciones del Ejecutivo que se formará en los próximos días, así como las necesidades políticas y de la ciudadanía. “El resultado ha estado a la altura”, ha agradecido Oltra sobre los trabajos de negociación.
Impuesto a viviendas vacías y Ley de Cambio Climático
Entre las 23 páginas del acuerdo se encuentran medidas de presión fiscal a los propietarios de viviendas vacías, para evitar la emergencia habitacional, una ley de cambio climático o la creación de una agencia de energía que trabaje por las renovables. Otros puntos clave acordados son una Ley de Juego que regule las casas de apuestas y su publicidad, una ley de mejora de la calidad del empleo, y reclamar un calendario para la reforma de la financiación