La Fiscalía de Castellón ha pedido la imputación del ex vicepresidente de la Diputación y diputado provincial Francisco Martínez, y del ex alcalde de Borriol, Adelino Santamaría, por supuestos delitos de prevaricación, tráfico de influencias, fraude ilegal y negociaciones prohibidas.
Las acusaciones son consecuencia del fallido proyecto de una depuradora en Borriol (Castellón). El proyecto, público, se iba a realizar sobre unos terrenos de Martínez y su familia que, al ser expropiados, iban a proporcionar grandes beneficios al que fuera hombre de confianza de Carlos Fabra en la Diputación de Castellón.Las denuncias de la oposición frustraron la iniciativa.
El fiscal instructor solicita al fiscal jefe una querella contra Martínez, sus hijos Andrea y Francisco, su supuesto socio, Raúl Babiloni, Adelino Santamaría y dos técnicos del ente provincial. A raíz de estos hechos, Santamaría también abandonó la alcaldía de Borriol. Martínez fue destituido a raíz de este escándalo por el sucesor de Fabra en la corporación provincial, Javier Moliner, enfrentado a su antecesor.