El vicepresidente para la reconstrucción tras la DANA de Valencia, José Gan Pampols, ha fichado como director de gabinete a Vicente Ferrer, un histórico del PP cercano al eurodiputado valenciano Esteban González Pons. Este político, con pasado también militar -fue teniente de Infantería y reservista de las Fuerzas Armadas-, también tuvo sus cuentas pendientes con la justicia por conducir ebrio precisamente cuando era diputado en el Congreso por el PP, lo cual le valió una condena de 8 meses sin permiso de conducir.
Vicente Ferrer, portavoz de la Comsión de Defensa en el Congreso cuando tuvieron lugar los hechos, el 30 de septiembre de 2012, cuando el diiputado fue interceptado conduciendo de forma errática en la avenida de Levante. Cuando la Policía Local le sometió a la prueba de alcoholemia el resultado fue de 0,82 y 0,84 miligramos de alcohol por litro espirado de aire, el triple de la permitida. En el proceso Ferrer reconoció los hechos y pactó una condena de conformidad. “Me reuní con unos amigos de la Universidad a comer una paella y ya se sabe lo que pasa: empezamos a la una y acabamos a las ocho y tomé la decisión errónea de coger el coche”, dijo Ferrer entonces, que también se disculpó: “Fue un error torpe, muy torpe”.
Pero además la polémica se alargó en el tiempo debido ya que Ferrer, cuando estuvo en el juzgado de guardia, no indicó que era diputado de las Cortes Generales. Debido a ello el juzgado de guardia tuvo que declarar la nulidad de las actuaciones, le devolvió el permiso de conducir y canceló la anotación de los antecedentes penales, y elevó una exposición razonada al Tribunal Supremo, el competente para procesar a los aforados en el Congreso. Posteriormente el alto tribunal mantuvo la condena de 8 meses sin carné y rebajó la multa a 720 euros.
La carrera política de Vicente Ferrer se inició en Unión Valenciana, y tras el conocido como 'pacto del Pollo' que aupó a president de la Generalitat a Eduardo Zaplana fue designado senador por designación de las Corts Valencianes, inicialmente por UV pero después del PP. Y es que Ferrer fue uno de tantos políticos que formaron parte del abrazo del oso que le hizo el PP a UV con trasvase de políticos del partido regionalista al popular a mediados y finales de los 90.
Tras su etapa de senador (1995-2003), fue concejal en Alboraia (2003-2015), diputado y vicepresidente de la Diputación de València (2003-2008), y diputado en el Congreso (2008-2015). Tras este periodo, y en los primeros meses del anterior gobierno del Botànic, el PP lo rescató para asumir el cargo secretario general provincial, un cargo que llevaba vacante seis meses.