Adolfo Soler Sempere, uno de los hombres fuertes del empresario y cerebro junto a Rafael Blasco de la trama para desviar fondos de la cooperación valenciana a inmuebles, un yate y hasta un avión, Augusto César Tauroni, se ha “escapado” del juicio que comenzaba ayer y que ha sido aplazado al 6 de mayo. Soler Sempere sí que había anunciado a través de su letrado de oficio que estaría presente en la Ciudad de la Justicia de Valencia para la vista oral, pero alegando motivos de salud se ha ausentado, poniendo en riesgo el propio procedimiento.
Soler Sempere huyó de España el 27 de junio de 2011, en plena tormenta mediática por la adjudicación irregular del hospital de Haití, y desde esa fecha no ha vuelto. Hasta su interrogatorio como imputado en fase de instrucción se tuvo que realizar a través de videoconferencia. El ahora procesado había anunciado a su abogado que había comprado el billete de avión y que debía haber llegado a España la semana pasada. Al no dar señales de vida, su letrado se puso en contacto con él y éste le dijo que había tenido que perder el vuelo por motivos de salud, según ha relatado su defensa en la vista de este lunes.
El fiscal Anticorrupción ha anunciado que ha solicitado a Bolivia que un equipo forense reconozca a Soler Sempere para confirmar la grave enfermedad que dice padecer. Además, ha solicitado al tribunal que se abra una pieza separada para juzgarlo en solitario, como ya pasara con uno de los principales imputados del caso Emarsa, en este caso por carecer de defensa. En caso de que hubiera mentido sobre su estado de salud, Anticorrupción propone pedir la extradición del procesado, que sí que es posible con la República de Bolivia.
Por su parte, la defensa del empresario Augusto César Tauroni considera a Soler Sempere uno de los “hombres clave” del juicio, por lo que ha pedido la suspensión de la vista oral que se reanuda el próximo 6 de mayo.
Adolfo Soler Sempere es el impulsor de la Fundación Hemisferio, la ONGD clave para el desvío de fondos de cooperación al pago de comisiones y compra de inmuebles en Miami. Además, era el administrador único de la sociedad Dinamiz-e, la empresa instrumental de Tauroni que consiguió decenas de millones de euros de las consellerias por donde pasó Rafael Blasco, entre ellas Sanidad y Solidaridad.
Fue militante de Unión Valenciana cuando Tauroni pertenecía a esta formación e impulsor del Partido Socilademócrata (PSD), la formación creada por el entorno de Blasco para desgastar al PSPV-PSOE, donde compartió filas con el hermano del exconseller Bernardo Blasco.