“En la Comunidad de Madrid Isabel Díaz Ayuso pedía exactamente lo mismo que nosotros pedimos aquí”. Así analiza Álvaro Alarcón, militante de Nuevas Generaciones (NNGG) del PP de Alicante, la sentencia que le ha dado la razón en su demanda contra la organización juvenil por no convocar un congreso contradiciendo sus propios estatutos internos. “Es verdad que esta es una situación local pero si Ayuso quisiera podría aprovechar la jurispurdencia de nuestro caso para apoyar su guerra interna en Madrid”, declara Alarcón a elDiario.es.
El titular del Juzgado de Primera Instancia número 7 de Alicante, tal como ha informado este diario, estimó la demanda interpuesta por el joven militante popular y acordó la convocatoria de los militantes y afiliados de NNGG a un “congreso o asamblea a realizar en su sede social” en una sentencia que no es firme y contra la que cabe recurso de apelación. De momento, la organización juvenil no ha recurrido la sentencia.
Álvaro Alarcón empezó a militar en NNGG de Alicante hace siete años, cuando Joaquin Sampere Buyolo presidía la gestora de la organización juvenil. Sin embargo, según cuenta, “empezamos a entender que no era buen presidente”. “Hacía reuniones extremadamente largas que no llegaban a nada, los puntos del día no se desarrollaban como tenían que desarrollarse y, además, presidía la gestora cuando llevaba más de seis meses”, es decir más del tiempo que prevén los estatutos.
Alarcón, junto con otro militante, empezó a presionar para que se convocara un congreso y acabara así la situación de interinidad. Francisco Joaquín Sampere Buyolo, entonces presidente de la gestora de NNGG en Alicante, dimitió tras superar el plazo que marcan los estatutos. “Llevaba ya dos años y cuando dimite el número dos pasa a ser presidente de la gestora de la gestora”, recuerda Álvaro Alarcón.
El militante solicitó a la dirección local, provincial y autonómica el cumplimiento de los estatutos internos y que se convocara un congreso. El entonces presidente provincial, Luisma Pizana Boj, puso el asunto en manos del Comité de Derechos y Garantías, que “nunca responde”, según Alarcón. “Luisma Pizana me dice que entendía que los de arriba tenían que solicitarlo”, cuenta.
Tras agotar las vías internas, los dos militantes disidentes envían un acta notarial solicitando la celebración de un congreso. “En todos estos correos decimos que nos estamos quedando sin vías internas y que la única vía que queda es denunciar al partido pero se nos dice que nos nos vamos a atrever y que, en caso de que pase, iban a ganar”, relata Álvaro Alarcón.
La demanda de Alarcón ha sido estimada por el titular del Juzgado de Primera Instancia número 7 de Alicante, a diferencia de la que presentó otro militante que fue desestimada. En el juicio oral declaró como testigo el expresidente autonómico de NNGG Juan Carlos Caballero. “Lo dicen: esto es una cosa de los de arriba, de los mayores decían”, asegura Alarcón, quien considera que “era una manera también de cargarle la culpa a los de arriba”. “Cuando fueron a declarar todavía tenían la esperanza de que les cayera algún puesto en política, sabían que ir al juicio y declarar en contra del partido no era bueno para sus propios intereses”, agrega.
La sentencia que ha obligado a NNGG a celebrar un congreso, que hasta el momento no ha sido recurrida, considera que “no cabe admitir” que la organización juvenil de Alicante “continúe desde octubre del 2017 sin elección de un presidente”.
“Una cosa es que circunstancias excepcionales 'graves' permitan nombrar comisiones que gobiernen transitoriamente algunas de las organizaciones territoriales y otra muy distinta que se esté privando a los militantes de su derecho de sufragio para la elección de un presidente desde hace más de cuatro años”, abunda el juez, que recuerda que el plazo transitorio para una gestora es de seis meses.
La sentencia “tiene relevancia nacional”
“Nunca nos amenazaron internamente pero siempre trataron de ridiculizarnos en todas las reuniones, eso era también lo que nos incomodaba porque nuestra pretensión era legítima, solo queríamos poder votar a nuestro presidente”, lamenta Alarcón, que lanza una explicación para justificar la larga interinidad: evitar una guerra interna entre Carolina Cutanda, la candidata no oficial del actual alcalde de Alicante, Luis Barcala, y Pablo Sanz Montoro, el candidato de la edil María del Carmen España. “Iba a haber problemas dentro del partido”, sostiene el demandante.
La sentencia, a pesar de centrarse en la organización juvenil en Alicante, puede inspirar a la presidente de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, sostiene Alarcón. “En Madrid Isabel Díaz Ayudo pedía exactamente lo mismo que nosotros pedimos aquí; es verdad que esta es una situación local pero si ella quisiese podría aprovechar la jurisprudencia de nuestro caso para apoyar su guerra interna en Madrid”, afirma. “Tiene relevancia nacional y, además, los tiempos del juicio han coincidido con la guerra interna en Madrid”, analiza Alarcón, quien advierte que si pasados los 20 días que tiene NNGG para recurrir el fallo no lo hacen, pedirán la ejecución de la sentencia, que obliga a convocar el congreso.