La Aemet (Agencia Estatal de Meteorología) ha mostrado los mapas de precipitaciones de los 21 temporales históricos desde los años 50 del siglo XX hasta la actualidad, pasando desde la riada de València de 1957 a la DANA de 2024.
Entre los comentarios que ha realizado Aemet advierte de los mensajes negacionistas que señalan “que siempre ha habido lluvias torrenciales en nuestro territorio y que estas serían unas más”. No obstante apunta que “siempre las ha habido, pero ahora, cuando se producen, la energía puesta en juego es mayor, la torrencialidad mayor y en menos tiempo, con fenómenos más violentos”.
Cono ejemplo explica que casi todos los episodios históricos se desarrollaron en, al menos, dos días, pero “el del 29 de octubre de 2024, lo más intenso del temporal se registró en poco más de 12 horas, entre las 8 y las 20 horas”. Así puntualiza como un ejemplo de referencia que “la riada de 1957 se desarrolló en dos fases, con lluvias torrenciales el día 13 de octubre de 1957 y otra nueva oleada el 14”.
Sobre la situación actual de cambio climático explica Aemet que “el calentamiento del aire y del mar observado en las últimas décadas está muy relacionado con variaciones de ciertos componentes del ciclo hidrológico y de los sistemas hidrológicos, entre ellos el aumento de la evaporación y el aumento del vapor de agua atmosférico”.
Este aumento del vapor de agua atmosférico “implica un mayor poder de liberación de calor latente cuando se desarrollan los fenómenos convectivos presentes en situaciones de lluvias torrenciales otoñales”. Por todo ello concluye que “estas variaciones detectadas, que dan lugar a una mayor energía y vapor de agua disponible en la atmósfera, pueden dar lugar a que las precipitaciones torrenciales sean más intensas cuando se produce una situación meteorológica adecuada”.