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Machado en Rocafort

[…] Creo más útil la verdad que condena el presente, que la prudencia que salva lo actual a costa siempre de lo venidero. La fe en la vida y el dogma de la utilidad me parecen peligrosos y absurdos. Estimo oportuno combatir a la Iglesia católica y proclamar el derecho del pueblo a la conciencia y estoy convencido de que España morirá por asfixia espiritual si no rompe ese lazo de hierro. Para ello no hay más obstáculos que la hipocresía y la timidez. Ésta no es una cuestión de cultura -se puede ser culto y respetar lo ficticio y lo inmoral- sino de conciencia. La conciencia es anterior al alfabeto y al pan […].

Es un fragmento de “Biografía” de Antonio Machado, recogida en Poesía y prosa, vol III: Prosas completas. La escribió en 1913. Estamos en el 2014. El autor de El mañana efímero sigue tan vigente como hace 75 años, seguramente, muy a su pesar. La España de charanga y pandereta, /cerrado y sacristía, /devota de Frascuelo y de María, /de espíritu burlón y de alma quieta, /ha de tener su mármol y su día, /su inefable mañana y su poeta […].

Estos días releo al poeta, que en voz de Juan de Mairena decía: “Por mucho que un hombre valga, nunca tendrá valor más alto que el de ser hombre”. Machado, que se declaraba “un creyente en una realidad espiritual opuesta al mundo sensible”, continuaría hoy más indignado que nunca con las cosas que ocurren en su amada España. Y no voy ha enumerar aquí las razones que son de sobra conocidas por ustedes.

Mi deseo con la introducción de este actual texto de Machado es recordar que el autor de Soledades y Campos de Castilla, vivió en Rocafort, muy cerca de Valencia, durante dos años. Fue en noviembre de 1936. Se instaló, junto a su madre y su hermano José, en una preciosa casa llamada Villa Amparo.

En julio de 1937 el escritor participó junto a otros prestigiosos intelectuales en el II Congreso Internacional de Escritores para la Defensa de la Cultura, que se celebró en el Ayuntamiento de Valencia. La ciudad era en esas fechas capital de la República.

Como en muchos aspectos estamos volviendo a la España que denunciaba Antonio Machado, desde este espacio me sumo a la reivindicación que hace unos días ha hecho el pueblo de Rocafort, y que no ha contado con los votos favorables del Partido Popular (PP). Pedir la adhesión del municipio a la Red de Ciudades Machadianas, formada por Sevilla, Soria, Baeza, Segovia y Collioure.

El próximo viernes 14 de febrero, durante la conmemoración del 75 aniversario de la muerte del poeta, se celebra en Barcelona una asamblea de la red en la que el consistorio valenciano espera que se decida la incorporación de Rocafort. También hay prevista toda una semana de actos culturales en homenaje al escritor. Conferencias, recitales, exposiciones, proyección de documentales, y la edición de un libro de diversos poetas actuales sobre la figura de Machado.

Además se colocará una escultura del poeta frente a Villa Amparo, diseñada por Tomás Gorria; financiada con aportaciones particulares de los habitantes de Rocafort, inspirada en la viñeta que Ramón Gaya publicó en Hora de España, que retrataba al poeta cruzando la acequia de Moncada. Les dejo con el poema Amanecer en Valencia.

Estas rachas de marzo, en los desvanes

-hacia la mar- del tiempo; la paloma

de pluma tornasol, los tulipanes

gigantes del jardín, y el sol que asoma,

bola de fuego entre dorada bruma,

a iluminar la tierra levantina…

¡Hervor de leche y plata, añil y espuma,

y velas blancas en la mar latina!

Valencia de fecundas primaveras,

de floridas almunias y arrozales,

feliz quiero cantarte, como eras,

domando a un ancho río en tus canales,

al dios marino con tus albuferas,

al centauro de amor con tus rosales.