Finalmente se ha confirmado. En un pleno 'secreto' por primera vez en 31 años -a puerta cerrada, sin la presencia de los medios de comunicación- y sin la participación de los diputados de Compromís y Esquerra Unida, que no estaban dispuestos a tomar parte en el 'aquelarre' político contra Mònica Oltra, el Partido Popular ha confirmado la sanción a la parlamentaria autonómica, que ha sido expulsada de Les Corts por un periodo de un mes.
Finalmente, los 52 votos del PP (no estaban el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra; el presidente de la Diputación de Valencia, Alfonso Rus; y el diputado Rafael Ferraro) han dictado sentencia -han votado en contra los 33 diputados del PSPV-. Precisamente, Oltra aseguraba tras confirmarse la sentencia que “si piensan que con esta sanción nos van a callar, van apañados”, al tiempo que recordaba cómo “el partido más corrupto del Estado ha votado mi expulsión”.
Además, la diputada de Compromís -respaldada por sus compañeros de coalición que portaban pegatinas con el lema #MònicaEmRepresenta, que también ha sido utilizado como hastag en Twitter- anunciaba que tienen decidido recurrir la sanción ante el Tribunal Constitucional porque “el PP no puede quitarme lo que me ha dado el pueblo”, en referencia a su condición de parlamentaria.
Así, tras la ratificación de la sanción por parte del Partido Popular, Oltra no podrá asistir en su condición de diputada a las sesiones y reuniones de los órganos de la cámara, ni presentar iniciativas parlamentarias. En este periodo, aunque sí cobrará el salario base, no recibirá el complemento por desempeño del cargo ni la indemnización por el ejercicio de la función parlamentaria.
Propuesta de sanción
La Mesa de Les Corts propuso que la parlamentaria fuera expulsada un mes tras los hechos sucedidos el pasado 8 de mayo, cuando Oltra se negó a abandonar el hemiciclo tras ser expulsada por Cotino después de recibir tres llamadas al orden.
La diputada de Compromís presentaba sus alegaciones contra la propuesta de sanción, insistiendo en que las llamadas al orden fueron inaudibles, al tiempo que desacreditaba el proceso y pedía la recusación del presidente de Les Corts alegando “animadversión” hacia su persona.