La investigación interna abierta por la Conselleria de Sanidad tras revelar eldiario.es que el alcalde de Orihuela, Emilio Bascuñana, no acudió a su puesto de trabajo en la dirección territorial de Alicante a la que estuvo adscrito de asesor entre 2007 y 2014 continúa. El último paso ha sido la declaración del propio Bascuñana ante la inspección sanitaria para presentar sus alegaciones, que se ha producido el pasado lunes 12 de noviembre en la dirección territorial de Sanidad en Alicante.
A preguntas de este periódico, desde el equipo de Bascuñana confirmaron la declaración pero aseguraron que no hay ninguna novedad. “Si hubiera novedades os informaríamos”, alegaron. Por su parte, desde la Conselleria de Sanidad declinaron hacer ninguna valoración “porque el expediente continúa abierto y se sigue recabando información”.
Llama la atención la discreción con que el alcalde de Orihuela ha llevado su declaración. De hecho, siempre ha dicho que dará todas las explicaciones pertinentes y que habría presentado una denuncia contra la Conselleria de Sanidad en lo que considera una “cacería política”. En este caso, el pasado lunes no hizo convocatoria de medios de comunicación ni tampoco ha enseñado a la prensa informes técnicos ni documentos que acrediten que trabajó en la dirección territorial.
La única coincidencia entre la versión de Bascuñana y los documentos oficiales es que a partir de 2012 -no hay ningún dato entre 2007 y el 31 de diciembre de 2011 registrado sobre su trabajo en la administración de la que cobraba- habría pasado alguna consulta de médico de primaria en ambulatorios de pedanías de Orihuela.
Nada más y nada que ver con la adscripción funcional que tenía en la dirección territorial, donde los funcionarios no lo han visto aparecer en siete años y donde nunca se cogió una baja, unas vacaciones o un permiso. Y tampoco nada que ver con su sueldo de más de 50.000 euros anuales.
La propia consellera de Sanidad, Ana Barceló, reveló en las Corts a preguntas de la diputada de Compromís, Mireia Mollà, las dudas razonables sobre la asistencia de Bascuñana a su puesto de trabajo en la dirección territorial de Sanidad en el periodo que ahora investigan los inspectores de la conselleria.
El último escándalo de la vida laboral del alcalde de Orihuela saltó tras la revelación de los tres informes internos de la conselleria que concluyen que Bascuñana fue un trabajador 'zombie' en la dirección territorial de Sanidad.