La alcaldesa de Novelda, Milagrosa Martínez, afirmó que defendería “con uñas y dientes” su inocencia ante los tribunales, después de tener que renunciar al escaño como diputada al ser imputada en 'Gürtel', y se atrincheraba en la alcaldía. Pero lo hizo mientras le dejó su propio partido, y cuando en un primer momento las 'líneas rojas' de Alberto Fabra se autolimitaban en aras de la “autonomía municipal”, conforme se aproximan las elecciones también se llega a los ayuntamientos, como se demostró con la forzada dimisión de Sonia Castedo.
Así tras la Caída de Castedo el PP puso sus ojos sobre 'la Perla' (como se conoce a la alcaldesa de Novelda en sus círculos cercanos) y le señaló la puerta de salida, pero esta opción fue rechazada por Martínez, acastillándose en su puesto. Pero esta resistencia no tiene el apoyo de todo el grupo popular del ayuntamiento, y de los 12 concejales del PP sólo 5 se han alineado con la alcaldesa, mientras los otros 6 son proclives a que dimita. Entre ellos estaba quien era el número 2, Rafael Sáez, también presidente local del PP, quien le pidió la dimisión voluntaria; la consecuencia: Milagrosa Martínez le despojó de sus áreas de gestión (Hacienda, Personal y Medios de Comunicación), retirándole con ello también su dedicación exclusiva.
Este gesto autoritario ha sido definitivo para que se hiciera una reunión de la ejecutiva local del partido excluyendo a los partidarios de la alcaldesa, reunión en la que se decidió solicitar a la dirección autonómica la suspensión de la militancia de la alcaldesa entendiendo que está perjudicando la imagen del PP al enfrentarse al partido.
Ahora el Comité de Derechos y Garantía del PPCV habría dado ya el paso definitivo de abrir un expediente disciplinario, el necesario para acabar en expulsión, para evitar así que Martínez se sentara como alcaldesa en el banquillo de los acusados a partir del 31 de marzo, al menos como alcaldesa por el PP.
La incógnita será cómo quedará la composición del ayuntamiento, si con la expulsión también le seguiran los concejales afines, si se conseguirá forzar así su dimisión, si se acudirá a la oposición para que faciliten una moción de censura a la alcaldesa, o si seguirá todo como hasta ahora, pero gobernando Martínez desde el grupo de no adscritos.