Las Corts ha vivido este martes un intenso debate a cuenta de la enmienda a la totalidad presentada por el Partido Popular a los presupuestos de la Generalitat Valenciana. No obstante, la sesión, que ha comenzado con un minuto de silencio en memoria de las víctimas de los atentados de París del pasado viernes, ha estado marcada por un rifirrafe entre el diputado popular Rubén Ibáñez y el president Ximo Puig, que ha llamado “payaso” al parlamentario del PP.
Concretamente, el encontronazo verbal se ha producido cuando Ibáñez se ha referido por primera vez -después ha vuelto a sacar este tema a la palestra en alguna ocasión más- a la subvención de 140.000 euros para el próximo ejercicio contemplada en los presupuestos de la Generalitat para el “ruinoso matadero de Morella”, del que Puig fue también presidente en su condición de alcalde al tratarse de una empresa pública municipal (Carns de Morella). Otra ayuda a la que se ha referido el diputado popular ha sido a la residencia de ancianos de la ciudad castellonense, cuya aportación también aumenta.
Estas insinuaciones han provocado que el president dijera “payaso”, según se ha justificado Puig en el marco de un debate en el que se le ha tildado de “indigno, prevaricador y no sé cuántas cosas más. Estoy seguro de que el señor Ibáñez no lo hacía aludiendo a mí personalmente sino que era un tema político”. Así, ha insistido en que su expresión se ha producido en el contexto de una conversación con la vicepresidenta, Mónica Oltra, “no he querido insultar a nadie, primero porque la profesión de payaso es muy digna”.
En este sentido, ha querido aclarar que si Ibáñez se ha sentido insultado, “lo retiro automáticamente, porque yo respeto a todos los diputados de esta cámara, incluso a aquéllos que objetivamente me estaban insultando, como ha sucedido en el día de hoy. Pero entiendo que me estaban insultando políticamente, no en el ámbito personal”.
Ibáñez, por su parte, ha pedido explicaciones por este calificativo tanto al jefe del Consell como al presidente de la Cámara, Enric Morera, quien ha asegurado no haber escuchado nada al estar el micrófono cerrado, por lo que la expresión no iba a constar en acta. “No voy a consentir que el president sea irrespetuoso”, ha asegurado Ibáñez, quien antes había acusado a Puig de primar el interés particular de la empresa que presidió, Carns de Morella, en detrimento del interés público, y de beneficiar a la residencia de mayores de Morella, en la que “gasta más que en todo el programa de la tercera edad de la Generalitat”.
Rechazan la enmienda a la totalidad del PP
En cuanto al debate de la enmienda a la totalidad presentada por el Partido Popular a los presupuestos de la Generalitat para 2016, la propuesta ha sido rechazada con el voto en contra de PSPV, Compromís y Podemos, mientras que Ciudadanos se ha abstenido. Los cuatro grupos han avanzado que intentarán mejorar las cuentas a través de enmiendas parciales, al tiempo que criticaban la enmienda del PP.
Ibáñez ha criticado los 1.325 millones de euros consignados en los presupuestos a cuenta de la mejora de la financiación de la Comunitat Valenciana, “es una irresponsabilidad. Son conscientes de que esa partida desaparecerá en cuanto suenen las doce últimas campanadas de 2015, por lo que estamos ante un presupuesto irreal y ficticio”. Además, ha asegurado que las cuentas “no crean empleo, no apuestan por la economía y recortan ayudas sociales, además de crear un nuevo copago”.
Desde el PSPV, José Enrique Muñoz, ha insistido en que estas cuentas “son el inicio de un largo camino y sirven para cerrar las páginas más oscuras de la historia democrática valenciana”. En este contexto, Muñoz ha apuntado que a los 40.000 millones de euros de deuda histórica de la Generalitat habría que añadir la deuda histórica “derivada de la corrupción y que podemos valorar en unos 12.500 millones, de los 1,6 parece que vamos a recuperar a cuenta del dinero robado en Cooperación”.
El jefe del Consell ha valorado el hecho de que el presupuesto siga adelante, “son los presupuestos del cambio y estamos en el camino correcto para avanzar en la transformación de la sociedad valenciana priorizando el interés general y con la reivindicación irrenunciable de los ingresos que merece esta Comunitat”.