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El PP quiere cerrar el liderazgo valenciano en julio eligiendo entre Bonig y Catalá

EUROPA PRESS

València —

El PPquiere dejar cerrado en el mes de julio quienes son los hombres de referencia, las caras visibles en diferentes comunidades autónomas donde ha perdido el poder, entre ellas la Comunitat Valenciana. No se trata de hacer congresos extraordinarios para propiciar los recambios, ya que la dirección nacional ha decidido que estos no se celebren hasta después de las elecciones generales, pero sí de elegir a las personas que piloten la transición en estos territorios cuando se lleven a cabo los cónclaves correspondientes.

El PP quiere marcar las caras visibles después de que los hasta ahora líderes del partido valencianos, Alberto Fabra y Rita Barberá, los destinará al Senado. Así el futuro de los 'populares' valencianos parece que estará marcado por la actual número 3 del partido, Isabel Bonig, o por la que hasta hace poco ha sido la portavoz de la Generlaitat, María José Catalá, ambas conselleras en el ejecutivo de Fabra.

Desde Génova se ha pedido al PPCV que propongan a una serie de candidatos basándose en distintos valores como liderazgo, credibilidad, cercanía, conocimiento, empatía o aceptación por parte de los ciudadanos. Así desde Madrid se prefiere que sean los propios territorios, que conocen mejor a su gente, quienes hagan las propuestas.

El PP valenciano quedó húérfano de liderazgo tras anunciar el propio Fabra que no se presentaría para ser presidente del PPCV.

La decisión de Fabra estuvo muy marcada por los innumerables casos de corrupción a los que ha tenido que hacer frente en las filas de su partido, con hasta 12 diputados imputados sentados en el grupo Popular de las Cortes Valencianas. La gota que colmó el vaso fue la detención del delegado del Gobierno, Serafín Castellano, pocos días después de celebrarse las autonómicas, acusado de prevaricación, malversación y cohecho por unas adjudicaciones que realizó a una empresa de extinción de incendios cuando era consejero de la Generalitat.

Tras no lograr la mayoría absoluta el 24-M, Fabra anunció que se mantendría en el cargo del PP de la Comunidad Valenciana hasta el próximo congreso para reforzar la estructura del partido que consideró “muy dañada”, pero dejó claro que él no se presentará a la reelección. Su opinión es que hay que renovar los mensajes y las caras para poder volver a generar confianza.

Y eso es precisamente lo que piensa la dirección nacional, que se necesitan caras nuevas que den un aire fresco al partido y quieren que esto se produzca durante julio, probablemente no será antes de la Conferencia Política, pero no quieren que pase de este mes. Su intención es que para las generales, ya haya una referencia diferente en estas dos CCAA.