La campaña electoral que dio a Rita Barberá en 2007 su mayoría absoluta más escandalosa (logró 21 de 33 concejales), supuestamente fue financiada de forma ilegal por donaciones de empresas adjudicatarias. Según Valencia Plaza, el Juzgado de Instrucción número 18 de Valencia que investiga el llamado caso Taula ha detectado más de tres millones aportados por empresas concesionarias y proveedoras del Ayuntamiento de Valencia al grupo Laterne, encargado de organizar aquella campaña en teoría con un coste declarado por el PP local de 150.000 euros.
La contabilidad de Laterne Product Council, SL, investigada por la Fiscalía Anticorrupción y la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, revela que empresas contratistas o constructoras con concesiones municipales, entre otras, aportaron a esa mercantil más de 3 millones de euros para financiar la campaña de la entonces alcaldesa de Valencia, fallecida el pasado 23 de noviembre días después de declarar en el Tribunal Supremo como imputada precisamente en el caso Taula por el supuesto blanqueo de dinero en el grupo municipal del PP durante la campaña de 2015, en la que perdió la alcaldía.
Propiedad de Vicente Sáez Tormo, una persona próxima a quien fue mano derecha de Barberá, Alfonso Grau, la investigación ha constatado la transferencia a Laterne de otros 800.000 euros procedentes de dos filiales: City Marketing Council y Product Management Council. Fallecido Sáez Tormo y quebradas las empresas, la investigación, según Valencia Plaza, tiene el problema de averiguar la procedencia de esos fondos. Sin embargo, una denuncia pública de los socialistas ya apuntó en 2009 que podía estar desviándose dinero de fundaciones municipales.
A City Marketing Council pagó de 2007 a 2008 unos 400.000 euros el Ayuntamiento de Valencia a través de la fundación Centro de Estrategias y Desarrollo de Valencia (CEyD), como denunció la entonces concejal socialista y hoy diputada en el Congreso Ana Botella, que resaltó la directa relación de Laterne con Barberá hasta el extremo de haber sido la organizadora de su campaña. También denunció Botella entonces que otra fundación municipal, Turismo Valencia Convention Bureau, pagó a Laterne entre 2006 y 2007 un total de 500.000 euros por un trabajo de campo para la revisión del plan estratégico de turismo.
Según los socialistas, la empresa que hizo la campaña de Barberá en 2007 cobró de noviembre de 2007 a mayo de 2008 más de 700.000 euros de fundaciones municipales. Laterne recurrió a la empresa de la trama Gürtel, Orange Market, a través de su responsable Álvaro Pérez, El Bigotes, para la organización en la precampaña del PP en las elecciones de 2007 de un mitin en el polideportivo de El Cabanyal en el que participaron Mariano Rajoy, Rita Barberá, Francisco Camps, Alberto Fabra y Luis Díaz Alperi.
Las irregularidades destapadas en CEyD, una entidad que dependía de la concejalía de Grandes Proyectos, que dirigía Alfonso Grau, cuya escasa actividad no se correspondía con su creciente presupuesto, llevaron a su cierre en 2011. Las cuentas del Centro de Estrategias y Desarrollo que obran en poder del Ayuntamiento de Valencia actualmente, a las que ha tenido acceso eldiario.es, revelan que la fundación recibió transferencias del Ayuntamiento de Valencia por 887.400 euros en 2006; 919.000 euros en 2007, año de las elecciones; 800.000 euros en 2008 y cantidades inferiores en años sucesivos.
El actual alcalde de Valencia, Joan Ribó, de Compromís, llevó en enero de 2011 el caso ante la fiscalía para que investigara si Barberá pagó a través de CEyD el acto de precampaña de 2007. Pero el fiscal jefe, Ricard Cabedo, lo archivó un mes después al considerar que no había “nada fundado” en que basar la investigación.