El nuevo presidente de la Autoridad Portura de Valencia (APV), Aurelio Martínez, no es proclive a la reversión de la ZAL del Puerto de Valencia. Suspender ahora el proyecto de la Zona de Actividad Logística, que lleva 22 años paralizada, supondría “un mal proyecto para la Comunidad Valenciana” y “pérdidas económicas importantes” explicó el máximo dirigente del puerto de Valencia el martes en les Corts.
“El problema es que llevamos 22 años y estamos iniciando el proceso otra vez” explicó el dirigente, quien añadió que ya está en marcha el tercer plan para habilitar la zona. Martínez defendió en la comisión de Infraestructuras que este proyecto podría suponer la creación de entre 2.100 y 2.800 empleos directos, cifras que ascienden a entre 5.250 y 7.000 empleos contando los directos, indirectos e inducidos, basándose en datos de informes y de otros puertos.
Martínez fue interpelado por los grupos parlamentarios sobre la ZAL que ya existe en Puerto de Sagunto, respecto a su utilización como espacio logístico para el puerto de Valencia en lugar de este proyecto. El presidente descartó esta opción y consideró que dicho espacio no es válido “porque está lejos”, repitió en varias ocasiones. Siguiendo la ruta por la que debería pasar el transporte, dado que supone el traslado de mercancías peligrosas, la distancia efectiva entre ambos puertos es de 49 kilómetros. Por ello, según Martínez, las empresas optan por instalarse en otras zonas como Ribarroja y en lugar de la ZAL de Sagunto.
No obstante, hizo hincapié en que este puerto más pequeño es una apuesta para la APV, al que destinan entre un 25% y un 30% de inversiones cada año. El puerto serviría, en palabras de Martínez, como descongestión del tráfico del puerto de Valencia, siempre que se habilitara el acceso norte por Alboraia. Asimismo, destacó la necesidad para el crecimiento económico la conexión ferroviaria con el puerto seco de Zaragoza, para competir con las infraestructuras de Barcelona.
Durante dos décadas se han sucedido críticas a este proyecto, desde amenazas para las playas valencianas hasta sentencias del Tribunal Supremo que anularon el plan de ordenación urbana -la última, en julio de 2015-, pasando por las pugnas de vecinos de las viviendas expropiadas. Al respecto, Martínez a lo que reconoció que el precio pagado por esas expropiaciones “nunca será suficiente por la pérdida sentimental” que supuso para los vecinos de La Punta. Sin embargo, el presidente aseguró que no sería recomendable revertir el proyecto dadas las circunstancias, “con todo lo que se ha invertido”. Por ejemplo, el coste de las expropiaciones fue de 105 millones de euros.
Respecto a las críticas por el impacto ambiental, el mandatario expuso que en economía, “desgraciadamente, no se puede contabilizar el coste ambiental”. A propósito, mencionó que la Ford de Almussafes y la Universidad Politécnica también se construyeron sobre terreno de huerta valenciana y que hoy en día nadie se plantea revertirlas.
La APV publicará un catálogo de obsequios
Durante su comparecencia en la comisión de Obras Públicas, Infraestructuras y Transportes, Martínez también informó de la adecuación de la institución a la Ley de Transparencia. La APV está trabajando en la modernización de su página web y, según avanzó el presidente, se está preparando un código ético para el funcionamiento de la institución y un catálogo de los obsequios que reciben.
Martínez trasladó a les Corts su compromiso con la transparencia y su voluntad para adecuar la institución lo antes posible. Además, explicó que la APV ha encargado una auditoria interna para esclarecer algunos aspectos de los que informa la Intervención General del Estado. Una vez se realice, “tomaremos las medidas necesarias” en la reestructuración del organigrama del puerto.