El alcalde de València, Joan Ribó (Compromís) se ha solidarizado este martes con el dolçainer del grupo Obrint Pas, Miquel Gironés, tras conocerse su percance con la Policía Nacional por haber usado en valenciano para comunicarse con los agentes, percance por el cual los policías fueron denunciados por vejaciones. “El meu total suport al dolçainer d'@obrintpas, @miquelgirones. Tots i totes hem de poder expressar-se en valencià en la nostra ciutat” (Mi total apoyo al dolçainer de Obrint Pas, Miquel Gironés. Todos y todas hemos de poder expresarnos en valenciano en nuestra ciudad“ reivindicaba el primer edil.
En la declaración en el juicio uno de los agentes llegó a tomar ciertas posiciones políticas defendiendo su conducta al decir que “si es valenciano me parece correctísimo [que me hablen en ese idioma], pero si es catalán, no”, escudándose en las teorías del secesionismo lingüístico que defienden los sectores más conservadores.