La veintena de trabajadores de Alicante, que la embotelladora Colebega debe readmitir por orden judicial, y que hoy se tenían que reincorporarse a su puesto de trabajo, anuncian que tan solo volverán, si se respetan las mismas condiciones laborales previas al ERE, lo que implicaría la reapertura de la planta alicantina.
El presidente del comité de empresa, José Vicente Salinas, afirma que les ampara la Ley, ya que la sentencia de la Audiencia Nacional, del 22 de junio de 2014, que anuló el ERE, obliga a la compañía “a reincorporar a los trabajadores a su mismo puesto de trabajo y en el mismo lugar”. Salinas denuncia que la empresa les ha amenazado “extraoficialmente” con no abonarles los salarios de tramitación si no se reincorporan en el día de hoy.
Los trabajadores se encuentran, en estos momentos a la espera de que la Audiencia Nacional resuelva el recurso que interpusieron en noviembre, después de que Colebega les informara de su traslado obligatorio. Desde entonces, los trabajadores “no han cobrado ni un euro”, asegura el presidente del Comité de Empresa.
La embotelladora alicantina tan solo mantiene el área comercial con 56 de los 156 trabajadores que componían la plantilla. Del resto, 50 se trasladaron voluntariamente a Valencia; 30 fueron prejubilados y 20 despedidos.
Se trata de una de las cuatro plantas que se cerraron como consecuencia del plan industrial de Coca-Cola y a las que hoy, día 9 de enero, se han reincorporado los trabajadores afectados por el ERE.