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“Ximo Puig ha puesto en marcha políticas de izquierdas, lo coherente, lo oportuno, sería refrendarlas”

Carmen Montón es una de las figuras que, habiendo estado del lado de Pedro Sánchez en su exitoso pulso por volver a ser secretario general del PSOE, ha decidido apoyar en las primarias de los socialistas valencianos a Ximo Puig, que apostó por la derrotada Susana Díaz.

Nacida en 1976 en Burjassot, donde fue concejala en sus inicios y de donde es alcalde el rival de Puig, Rafa García, Montón fue miembro de la ejecutiva federal que lideraba Sánchez y permaneció en ella hasta que aquel fue forzado a dimitir. Se encontró entonces en un bando enfrentado al del presidente de la Generalitat Valenciana y secretario general del PSPV-PSOE, Ximo Puig, a cuyo gobierno pertenece.

Había optado por centrarse en su tarea como consellera de Sanidad Universal y Salud Pública y no intervenir públicamente en la vida de su partido. Superado el congreso del PSOE y en pleno proceso congresual del PSPV-PSOE, ha decidido explicar su posición de apoyo a la reelección de Puig como secretario general.

Pregunta. Cuando se produjo la dimisión de Pedro Sánchez optó por callar. ¿Qué ha cambiado para que intervenga ahora?

Respuesta. Tomé la decisión de apoyar a Pedro Sánchez en la ejecutiva que compartíamos porque era dar el apoyo al secretario general del PSOE. pero tras ese gesto decidí mantener silencio porque también era consciente de que participar de manera muy protagonista de un proyecto federal podía desestabilizar, debido a las circunstancias, un gobierno en el que estamos en coalición, apoyados dentro y fuera. Fue un ejercicio de responsabilidad porque entiendo que el gobierno está por encima de todo. Es el bien que tenemos que proteger o preservar desde el Partido Socialista. Todas las cosas que durante 20 años habíamos estado escribiendo en los programas electorales, ahora las estamos haciendo realidad. Para eso hemos trabajado mucho tiempo en el socialismo valenciano. Mantuve mi postura por convicción y creo que lo hice de una manera leal. Para mí la lealtad es decir las coss, hacerlo con transparencia, sin ofender a nadie. A lo mejor algunos entienden por lealtad decir siempre que sí aunque vaya en contra de tus convicciones. Eso es sumisión. En el PSPV ha de haber lealtad y no sumisión.

¿Ese mismo argumento de no desestabilizar es el que la lleva a apoyar públicamente en estos momentos a Ximo Puig?

Tengo dos argumentos. Uno, que hay que preservar el gobierno porque estamos haciendo políticas de izquierdas que son de vanguardia dentro de los gobiernos de cambio. No voy a extenderme con ejemplos de sanidad, mi conselleria, en la que creo que esto que digo es clarísimo. Dos, el modelo de partido. Ximo Puig representa los mejores valores del socialismo valenciano, que tiene su diferencia. Quiero federalismo, quiero autonomía, quiero feminismo y quiero, sobre todo, la construcción de un espacio donde todos tengamos nuestro pequeño lugar para expresar nuestra opinión, para aportar, en el que haya participación. Ximo Puig ha demostrado que no tiene miedo a la democracia y a la participación. Ha sido abanderado de la idea de un militante un voto, de las primarias abiertas, y yo quiero ese modelo de partido donde todos contamos.

Pero cuando se produjo la crisis que llevó a la dimisión de Pedro Sánchez, se encontraron en posiciones enfrentadas. ¿Cree que Puig se equivocó entonces?

Eso lo que demuestra es que él toma sus decisiones y yo tomo las mías. Tengo voz propia e intento, sin estropear nada, mantener una coherencia. Y la misma coherencia que me lleva a luchar por que Pedro Sánchez sea secretario general y presidente del Gobierno, que es lo importante, porque será muy buen presidente y pondrá en marcha políticas como las que estamos aplicando en la Comunidad Valenciana, hace que quiera que Ximo Puig sea presidente de la Generalitat y secretario general del PSPV. Es difícil en la tradición socialista, en nuestro aprendizaje, separar esas dos figuras.

Después de aquello, Pedro Sánchez ha vuelto. Supongo que se ha alegrado de ello.

Estoy muy contenta.

Pero otra vez, en las primarias Ximo Puig se ha situado frente a Pedro Sánchez, al apoyar a Susana Díaz. ¿Ha sido un error?

La vida no son trincheras sino proyectos. El proceso federal comenzó y terminó con un secretario general que es Pedro Sánchez, con el que me siento totalmente identificada. Y ahora empieza un proceso distinto en el que quiero que sea secretario general Ximo Puig. Entiendo así la vida. Veo proyectos y el de aquí es un proyetco distinto en el que nos jugamos mucho para el socialismo. Ya no hablo del instrumento partido sino del socialismo valenciano, que vuelve a ser un referente para mucha gente. Ayer estuve en el Consejo Interterritorial y no hay ninguna comunidad autónoma como la nuestra: hepatitis-C, tratamientos de infertilidad para mujeres lesbianas, eliminación del copago, universalidad... Lo hemos hecho todo muy rápido. El nuestro es un proyecto genuinamente de izquierdas y merece la pena llevarlo adelante.

Insistiendo en los posibles errores, ¿se equivoca, pues, Rafa García al presentarse a las primarias frente a Ximo Puig?

Tiene derecho a presentarse. Ximo Puig, además de ese derecho como cualquier militante, tiene el aval de que ha puesto en marcha políticas de izquierdas. Lo coherente, lo oportuno, sería refrendarlas. Ha demostrado que es capaz de liderar esas políticas y las encuestas que publican algunos diarios están marcando que crece la opinión favorable a las políticas que estamos haciendo en el Consell.

¿Ve posible la convivencia de Pedro Sánchez y Ximo Puig?

Por supuesto. Creo que el principal objetivo de Pedro Sánchez es ser presidente del Gobierno y también necesita que el PSPV tenga músculo, que todas las federaciones tengan músculo. Lo veo viable. Sabrán hablar. Sabremos entre todos hacerlo bien. Lo contrario sería imperdonable.

¿Le habría gustado estar en la nueva ejecutiva de Pedro Sánchez?

He estado doce años en Madrid, participando en proyectos federales, en dos ejecutivas y de diputada haciendo cosas muy importantes, como la ley del matrimonio homosexual o la ley del aborto. Hay ciclos. Ahora estoy aquí. Lo he dicho muchas veces, mi momento está aquí. Quiero alzar la voz, romper el silencio, poder hablar por mí misma. Cuando mantienes un silencio voluntario, otros hablan por tí y construyen una idea que no es correcta. Es lo que tiene el silencio.

¿El PSPV va a salir dividido de estas primarias y este congreso?

En lo que de mi dependa, no saldrá dividido. Necesitamos unidad y que la militancia tenga protagonismo para ayudar a codecidir muchas cosas. Si la militancia está fuerte y las decisiones son compartidas, la ciudadanía nos va a entender mejor y nos va a apoyar más. Es el momento de la militancia y de abrirnos a la ciudadanía.

¿Qué cambios hay que hacer en el partido a partir de este congreso?

No partimos de cero. El partido siempre está en renovación. Hemos sido punta de lanza en cosas como las primarias abiertas a la ciudadanía. No las han hecho partidos emergentes, las ha hecho el Partido Socialista. Hay que seguir. ¿Medidas concretas? Sería interesante crear canales más ágiles para facilitar una participación real. Además, está la ciudadanía. Muchas personas no se quieren comprometer con un carnet pero son socialistas de corazón. Se tiene que dar relevancia a la figura del simpatizante.

Hay muchas críticas a cómo ha funcionado el PSPV porque el partido se ha abandonado, porque lo llevan entre cuatro... ¿Qué opina?

Hay que refrescarlo todo, las ideas y también los equipos. Estábamos adiestrados a ser partido de oposición. Ahora somos partido de gobierno, no solo en la Generalitat sino en muchos ayuntamientos. Un 40% de los ayuntamientos tienen alcaldes socialistas. Eso te hace tender hacia la institución. Pero estamos en un momento crucial porque tenemos que renovar equipos, ideas y proyectos, mirando a las próximas elecciones. Es como una puesta a punto de cara a esa carrera.

¿Cómo se lleva usted con José Luis Ábalos?

Estuve con él en la ejecutiva de Joan Ignasi Pla y he estado con él todo lo que él ha sido diputado, menos esta última legislatura. Nos llevamos bien. Peco más de tímida que de malcarada. Es difícil llevarse mal conmigo.

¿Y qué piensa del papel de Ábalos como secretario de Organziación?

Creo que puede demostrar muchas cosas, darle importancia al socialismo valenciano. Creo que es el tercer valenciano que ocupa el puesto. Estuvo Ciprià Ciscar, estuvo Lire Pajín. Ahora está él. Cuando estás en sitios grandes te tienes que esforzar en sacar lo mejor de tí mismo. Confío que lo pueda hacer.

Pero la experiencia histórica del PSPV con secretarios de Organización del PSOE valencianos no es muy buena: gestoras, conflictos...

Por eso Ábalos tiene que sacar lo mejor de sí mismo. Deseo que le vaya bien porque querrá decir que le va bien al PSOE, a Pedro Sánchez, que llegaremos al Gobierno....