La alcaldesa de València afirma que la moratoria para apartamentos turísticos durará un año y prohibirá los megacruceros en 2026

València comienza a poner coto a los problemas que genera la excesiva turistificación de la ciudad. La alcaldesa del PP, María José Catalá, informó este viernes de dos importantes medidas que tienen que ver con limitaciones de los apartamentos turísticos por un lado y por otro con los megacruceros.

En el caso de los viviendas de uso turístico, Catalá confirmó que el pleno del Ayuntamiento de València aprobará el martes 28 de mayo una moratoria, tal y como avanzó elDiario.es. En virtud de esta moratoria que tendrá una vigencia de un año prorrogable a un segundo año, se paralizarán las autorizaciones para poner en marcha nuevos apartamentos tanto en bajos de edificios como en el resto de plantas. Sin embargo, no afectará a los edificios dedicados en exclusiva a apartamentos turísticos, ya que se consideran una actividad económica equiparable a un hotel, por lo que no les afectará la suspensión.

“El objetivo es hacer una buena regulación y evitar la proliferación de este fenómeno que afecta a todas las grandes ciudades y también dejar tiempo a ver si el ministerio también coordina un marco común para todas las ciudades de España”, dijo Catalá en un acto organizado por Las Provincias.

En cuanto a los megacruceros, a los que ya se está poniendo límites en otras ciudades como Barcelona, Catalá anunció que “en 2026 se va a limitar la posibilidad de que esos megacruceros vengan a la ciudad de València; los que sean más reducidos, de otro perfil y que generan una riqueza en la ciudad se mantendrán, pero en 2026 las ciudades flotantes dejarán de venir a València”. Desde el equipo de Catalá no concretaron a qué tipo de barco en cuanto a dimensiones y capacidad se refieren cuando hablan de megacruceros.

La portavoz municipal del PSPV, Sandra Goméz, candidata socialista al Parlamento Europeo, aseguró sobre la moratoria que se trata “de un anuncio electoralista que se hace el primer día de campaña de las europeas, pero que no tiene voluntad real de que cambie nada” y aseguró que “Catalá es consciente del malestar que existe en la ciudad con los apartamentos turísticos ilegales que ella misma ha propiciado y tiene miedo de que le pase factura en esta campaña”. Para Gómez, la moratoria “llega tarde y llega mal porque hay más de 3.500 apartamentos turísticos ilegales que se han abierto durante su mandato y por eso exigimos que la medida sea retroaciva y que pueda aplicarse a esos apartamentos ilegales”.

La portavoz de Compromís per València, Papi Robles, presentó en el registro municipal las primeras 271 denuncias ciudadanas de apartamentos irregulares que han llegado a través de la web quenotetiren.com en tan sólo tres días. Robles destacó que “desde Compromís hemos tenido que actuar ante la inacción de Catalá y Mazón. Ahora esperamos que hagan su parte del trabajo, que es enviar al cuerpo de inspección para confirmar todas estas denuncias y cerrar aquellos establecimientos que están operando de forma irregular”.

La portavoz de Compromís recordó: “Hasta en cuatro ocasiones hemos instado a Catalá a instaurar una moratoria de las licencias de apartamentos turísticos en la ciudad y se ha negado de forma rotunda. Mazón tiene en un cajón la propuesta que tramitamos desde el gobierno local de Joan Ribó para declarar zona tensionada nuestra ciudad. Pero nosotros vamos a seguir insistiendo”.

Críticas de la patronal de apartamentos turísticos

El presidente de la Asociación Valenciana de Viviendas de Alquiler de Corta Estancia, Eric Sanjaime, criticó el anuncio de la alcaldesa de Valencia, María José Catalá, de aplicar una moratoria a las viviendas de uso turístico (VUT) “sin reunirse con el sector para buscar soluciones reales y con la clara intención de perjudicarlo para favorecer otros intereses”.

La moratoria debería extenderse “a cualquier tipo de actividad turística, incluso a los proyectos hoteleros que están en marcha y que suponen cambios de uso de edificios completos”. Porque el turismo “no son solo las viviendas turísticas, sino también los hoteles, los locales de ocio y restauración, o cruceros”, aseguró.

“Nos tememos que las intenciones reales de Català no sean favorecer la regulación del turismo sino los intereses de los hoteles” apuntó Sanjaime, quien señaló las vinculaciones del PP con la patronal hotelera. Así, recordó que la actual consellera de Turismo, Nuria Montes, fue secretaria de la Asociación Empresarial Hotelera y Turística de la Comunidad Valenciana (HOSBEC) antes de llegar al Consell.