El año 2021 que está a punto de comenzar será clave en la transformación del centro histórico de València, puesto que se acometerá la reurbanización de dos de sus principales plazas, se conocerá el diseño definitivo de la del Ayuntamiento y se pondrán en marcha las cámaras de control de vehículos.
La filosofía acordada tanto por Compromís como por el PSPV va en la línea de liberar de tráfico tanto las grandes plazas del centro, como las de los barrios, y recuperarlas como espacios peatonales.
En este sentido, según han iformado fuentes de la Concejalía de Desarrollo Urbano que dirige la vicealcaldesa Sandra Gómez, está previsto que entre enero y febrero se adjudiquen las obras de peatonalización de las plazas de Bruges y del Mercat.
El Ayuntamiento aprobó el pasado mes de julio el inicio del procedimiento de adjudicación para contratar la ejecución de los trabajos, una tramitación que está en su fase final. El proyecto lo ha redactado la Unión Temporal de Empresas (UTE) Quintana y Peñín. Esta intervención cuenta con un presupuesto de 8,3 millones de euros.
Según el proyecto aprobado, toda la plaza del Mercat se sacará a la luz todo el adoquín original ubicado bajo el actual asfalto y se combinarán las tonalidades y tamaños del pavimento del resto del entorno en función de su ubicación y de si se instala en zonas peatonales o transitables con vehículos.
Además se eliminará el actual arbolado de gran porte ubicado en toda esta plaza y en su lugar se plantarán palmeras, puesto que permiten una mejor visualización del entorno monumental, salvo en la fachada principal de la Lonja, que quedará libre de obstáculos visuales.
También se genera un pequeño graderío de cuatro peldaños flanqueando las 'covetes' de San Juan, un espacio que también será plenamente accesible. La plaza de Comunió de Sant Joan, ubicada tras la iglesia, quedará peatonalizada y con juegos infantiles.
En cuanto a la plaza de Bruges, destacan las dos pérgolas cubiertas que se instalarán como zonas de descanso con sombra para disimular los ascensores y accesos al aparcamiento. Ambas tendrán placas fotovoltaicas que permitirán instalar cargadores de telefonía y dotarán de energía eléctrica a la Llotgeta.
La plaza de la Reina, a la espera de un recurso
En cuanto a la plaza de la Reina, el inicio de obras está pendiente de una resolución del Tribunal Administrativo Central de Recursos Contractuales (TACRC) del Ministerio de Hacienda, tras el recurso interpuesto a principios del presente mes por una de las empresas que concurrió al concurso, en concreto, Orthem-Guerola.
Si la resolución es favorable al Ayuntamiento, las obras arrancarán de manera inmediata puesto que la contratación de los trabajos con a la UTE Edifesa-Collosa ya estaba en su fase final. De lo contrario, dependerá de lo que dictamine el TACRC en su resolución.
Las obras de reurbanización de la plaza de la Reina suponen una inversión 10,7 millones de euros. Una vez empiecen los trabajos, los cuales se desarrollarán por fases incluyendo la remodelación completa del aparcamiento subterráneo, se prolongarán entre 12 y 14 meses. El espacio contará con 115 ejemplares arbóreos frente a los 53 actuales.
Las rampas del aparcamiento estarán dispuestas de forma lineal entrando a la plaza a la derecha, de manera que los vehículos que entren por la calle de la Paz podrán acceder directamente al parking y los que salgan del aparcamiento girarán por la calle del Mar.
La pavimentación evocará la alineación de las calles y manzanas históricas situadas entre la Catedral y las calles Corretgeria y Cabillers e identificará mediante un pavimento diferenciado el trazado de la antigua muralla romana, así como de una cripta.
Concurso de ideas de la plaza del Ayuntamiento y cámaras
También a principios del año 2021 está previsto que se licite el concurso de ideas que debe definir el diseño definitivo de la plaza del Ayuntamiento. El proceso contará con un presupuesto cercano a los 400.000 euros.
Una vez se apruebe, habrá un plazo de unos seis meses para que los despachos de arquitectos interesados presenten sus proyectos básicos. Una vez pasado ese primer plazo, el jurado (compuesto por arquitectos y urbanistas, entre otros expertos) seleccionará cinco propuestas, las cuales serán expuestas y defendidas por sus autores. De ellas, saldrá la ganadora que tendrá otros seis meses más para presentar el proyecto definitivo de reurbanización.
La reforma de la plaza del Ayuntamiento ya pasó por un proceso de consulta ciudadana en el que participaron 1.800 personas de todos los distritos de la ciudad, de los que un 70% ni viven ni trabajan en la zona. En la fase de propuestas colaboraron 700 personas y 33 entidades (fallas, asociaciones vecinales, comerciantes, arquitectos, ecologistas y asociaciones en favor de la igualdad).
Entre los criterios principales destacó la idea de que la plaza debe contar con más elementos de jardinería, más zonas de descanso con sombras y mobiliario adecuado como bancos con respaldo, debe disminuir los elementos que obstaculicen el tránsito peatonal (terrazas, vehículos estacionados, elementos publicitarios) y debe enfatizar la imagen arquitectónica del conjunto.
Por último, está previsto que el sistema de control de acceso de vehículos a Ciutat Vella mediante un sistema de cámaras de lectura de matrículas empiece a funcionar de manera efectiva, es decir, con sanciones, a partir del próximo mes de abril, tal y como informó recientemente el edil de Movilidad, Giuseppe Grezzi.
Los dispositivos dispositivos están instalados en la calle de Corona desde la calle de Guillem de Castro; en la calle de Salvador Giner en su acceso desde la plaza del Portal Nou; en la calle de Salvador en el cruce con la calle de Trinitaris; en la plaza del Mercat a la altura de la calle de Trench y a la salida del parking del Mercado Central en su giro hacia la calle de la Boatella.
Los vehículos que circulen por el Área de Prioridad Residencial (APR) de Ciutat Vella Nord deberán tener una autorización de acceso, circulación y estacionamiento en esta zona. Los taxis y otros medios de transporte regular como los autobuses de la Empresa Municipal de Transportes (EMT) no precisarán ninguna autorización para transitar por ese espacio.
Las bicicletas, los ciclos de transporte de personas o mercancías y Vehículos de Movilidad Personal (VMP) también podrán circular libremente por el espacio que estará delimitado.
A grandes rasgos, residentes, propietarios o arrendatarios de inmuebles o de plazas de garaje, proveedores, empresas de mudanza o de vehículos de alquiler con conductor (servicio de plataformas como Uber o Cabify) podrán acreditar sus vehículos para entrar y salir sin problemas de la zona controlada por las cámaras.
En el caso de los vecinos y vecinas, pondrán dar permisos puntuales a 10 vehículos al mes aportando al Ayuntamiento la matrícula de cada uno en plazo de 72 horas anterior o posterior al acceso a la zona restringida para evitar así ser sancionados.