Deliveroo y un 'rider' se enfrentan por primera vez en un juicio en España

Tres horas y media ha durado el primer juicio en España que un rider le ha planteado a la plataforma de reparto de comida Deliveroo. La empresa había conseguido hasta la fecha parar las demandas de repartidores con importantes sumas de dinero en Barcelona y Madrid, pero Víctor Sánchez se ha negado a recibir “diez veces la indemnización” –entre 10.000 y 15.000 euros– y ha decidido llegar hasta el final.

La vista oral se ha celebrado en el juzgado de lo Social número 6 de Valencia, en la sala 14 de la Ciudad de la Justicia. Al juicio se ha presentado el abogado de Deliveroo con tres testigos y el demandante Víctor Sánchez con su abogado –facilitado por Intersindical Valenciana– y otros dos testigos.

La vista ha sido larga y tensa y en ella las dos partes han mantenido el argumentario que vienen deslizando desde que Deliveroo despidiera a Víctor, justamente en el mismo momento en que se planteaba montar un colectivo de riders contra “la precariedad laboral” de la plataforma digital. La empresa siempre ha mantenido que no hubo causa efecto y alega motivos laborales.

Cambios continuos en los contratos

En lo que han coincidido los cinco testigos, cuatro riders –dos a favor de la empresa– y un manager de Deliveroo, es en que la plaforma digital “cambia” los contratos de manera recurrente. Los ciclistas repartidores que lo aceptan siguen en la empresa y los que no dejan de trabajar. En un contrato se les pide que lleven publicidad, en otro no, en otro se da más libertad horaria, en otro no, han declarado.

En el juicio que ha finalizado a las 17 horas también se ha evidenciado que las condiciones laborales, sobre todo por lo que respecta a la libertad horaria, han ido cambiando con el tiempo. En la actualidad esas condiciones son mucho más laxas, se ha explicado en el juicio. Y ese es uno de los pilares fundamentales que defiende Deliveroo para justificar que sus repartidores son autónomos. En un principio, cuando Víctor Sánchez trabajaba, el control era absoluto, ha apuntado su abogado.

Deliveroo ha seguido manteniendo durante toda la vista oral que sus riders son autónomos y que no están sujetos a las directrices de la empresa. Por su parte, el abogado del demandante ha defendido que la plataforma digital utiliza la figura del falso autónomo para no ofrecer los derechos laborales que tendría un asalariado y pagar así las cuotas de la Seguridad Social.

En los próximos días, la Fiscalía deberá emitir un informe que concluya si la causa debe seguir en el juzgado de lo Social, es decir, que la relación entre Deliveroo y el rider fue de empresa a empleado o en un Mercantil. En este segundo caso, se daría a entender que la relación entre la plataforma y el ciclista es entre empresa y autónomo. Con este informe la causa está vista para sentencia.

Repercusión del juicio sobre los riders

ridersLo que importa es lo que digan los tribunales. Es lo que defendía Deliveroo en sus respuestas sobre las actas de la Inspección de Empleo que han fallado que los riders son falsos autónomos, una de ellas en Valencia y otra en Madrid. Estas resoluciones han estado muy presentes en el juicio celebrado este miércoles. “La competencia para declarar la existencia o no de relación laboral corresponde a los tribunales de justicia”, reaccionaban desde la empresa a eldiario.es tras conocerse la segunda resolución de la autoridad laboral en Madrid.

La empresa se ha agarrado en este tiempo a que los tribunales en España nunca habían fallado sobre su modelo laboral, frente a los casos de Reino Unido y Francia que habían respaldado la autonomía de los riders. Para evitar los juicios, habían llegado a acuerdos económicos que en este caso no han tenido efecto. Ahora que una denuncia de uno de sus repartidores llega por fin ante una jueza, la compañía precisa a este medio que se trata de “un caso aislado”. Fuentes de Deliveroo sostienen que “este rider tenía un contrato anterior, por lo que cualquiera que sea la resolución del juicio no tendría ningún impacto en la actual flota de riders ya que los contratos han cambiado. Por tanto, este juicio no tiene ningún impacto en el modelo operativo actual”.

Adrián Todolí, profesor de Derecho Laboral en la Universidad de Valencia presente en el juicio, considera que este caso sí puede llegar a tener relevancia sobre el modelo laboral de la multinacional. Aunque “jurídicamente” solo será vinculante para el caso de este repartidor, que tiene un contrato anterior a los actuales en Deliveroo, habrá que estar pendiente de las argumentaciones de la magistrada para establecer si hay o no relación laboral con el repartidor. “Si las razones de la magistrada abordan de manera amplia la cuestión y afectan a cuestiones que se aplican también en el nuevo contrato de Deliveroo, tendrá relevancia”.

Todolí sostiene que una de esas cuestiones clave es “la libertad de horario”, a la que se aferra Deliveroo en los contratos actuales para argumentar la autonomía de los riders. “Será importante si, por ejemplo, la jueza establece que la libertad de horarios es irrelevante para establecer si hay laboralidad o no, como ha dicho ya el Supremo en otras sentencias, y que son más determinantes otras cuestiones”. Además, como ha recordado un exrider a este medio, este mes Deliveroo deberá hacer frente a más denuncias de repartidores, en este caso en Barcelona.