- Por dos vías diferentes, dos socios de eldiario.es nos han pedido que escribamos sobre cómo apañarnos si queremos salir de noche sin tomar alcohol pero tampoco bebidas dulces
Es ciertamente una tarea ardua planificar una noche de fiesta con amigas y amigos excluyendo el alcohol y las bebidas dulces, que se pueden considerar igual de tóxicas para la salud. Y no lo es porque no se pueda o sea aburrido socializar sin la ayuda de estos dos venenos metabólicos, sino porque es una batalla sin tregua negarse a la continua oferta de brebajes cargados de alcohol, de azúcares añadidos o de ambas cosas a la vez.
Por lo tanto, hemos optado por iniciar el artículo con un listado de aquellas bebidas que debemos evitar si realmente queremos mantenernos sanos y sanas y con el hígado y el páncreas impolutos. Algunas son bastante obvias, pero otras quizás podríamos caer fácilmente en la tentación de aceptarlas creyendo que están libres de mácula cuando o bien contienen alcohol o azúcares.
Qué tragos evitar
- Bebidas alcohólicas: una obviedad, pero nos sirve para recalcar que ninguna bebida alcohólica es en puridad buena para la salud, ni que sea una copa al día. No vale pensar que por tomar cervezas o copas de vino se perjudicará menos al hígado. Al final de la noche lo que contará son las cantidades etílicas ingeridas, no si proceden de una ginebra, un destilado de caña o de un cariñena pasado por barrica doce meses.
- Cervezas sin: El término 'sin' no quiere decir que no tengan alcohol. Aunque tenga comparativamente mucho menos, algo tienen. La media del mercado se sitúa entre 0,5 y un grado alcohólico, tal como reveló en 2009 un estudio de la revista Consumer. Es una cantidad fácilmente metabolizable por el hígado sin mayores problemas, pero si queremos evitar completamente el alcohol, esta bebida no es indicada.
- Bebidas energéticas: podemos caer en la trampa de creer que una bebida energética de las muchas que hay en el mercado es un modo sano de inyectarnos cafeína en sangre y aguantar toda la noche con la energía suficiente para socializar y quien sabe si bailar. Pero lo cierto es que además de cafeína nos meteremos en el cuerpo un montón de azúcares, en concreto en el caso de 100 mililitros de Redbull son 10 gramos de azúcar. Si tenemos en cuenta que una lata son unos 330 mililitros, nos daremos cuenta que a poco que nos tomemos tres latas ingeriremos 99 gramos gramos de sacarosa, el equivalente a 25 terrones de azúcar...
- Bebidas isotónicas: no son recomendables por dos motivos básicos. El primero es que si abusamos de ellas podemos elevar demasiado los niveles de sodio y potasio de modo innecesario, ya que no habremos perdido antes estos iones por sudoración y ejercicio intenso. Si pensamos que estas serán nuestras bebidas cuando salgamos los fines de semana, cometemos un error grave. A la larga, el tener los altos niveles de sodio en sangre -que se conoce como hipernatremia- puede afectar a los riñones, provocar mareos y arritmias cardíacas. El segundo motivo es que contienen azúcares añadidos casi en la misma cantidad que las bebidas energéticas. El Powerade, por ejemplo, contiene 28 gramos por botellín.
- Bebidas carbonatadas en general: Una sola lata de CocaCola contiene 35 gramos de azúcar, el equivalente a 8,7 terrones. Y esta es la media general del sector, con lo que está claro por qué hay que pasar de colas, fantas, trinas y cualquier otra cosa similar. Nada de bebidas con gas.
- Tónicas: podríamos pensar que es el estimulante ideal, ya que sabe a gintónic, nos mantiene despiertos y es refrescante. Pero no: tiene 28 gramos de azúcar por botellín, suficiente para tener al páncreas fabricando insulina toda la noche.
- Tes industriales endulzados: Entran en la misma categoría que las bebidas carbonatadas y rezuman azúcares añadidos.
- Mosto: el mosto es zumo de uvas, es decir azúcares sin la fibra vegetal que podría hacerlos soportables para el organismo.
- Bebidas 'light': Las bebidas 'light' tienen quizá menos azúcar, pero siguen teniendo una buena ración que no las hace aconsejables. En cuanto a las cervezas 'light' se siguen considerando bebidas alcohólicas que pueden llegar a 3,5 grados y además algunas tienen azúcares añadidos.
- Cócteles de zumos de fruta: Los zumos de fruta naturales, al igual que el mosto, son puro azúcar diluido. Así que di no al célebre 'San Francisco' cuando te lo ofrezca el barman.
Recomendaciones para una noche de marcha sana
No es fácil encontrar alternativas en un mundo como el de la noche, diseñado para consumir alcohol y azúcares mezclados. Lo más sencillo es apostar por las infusiones variadas, ya sean estimulantes o no, aunque en verano puede que no sean buena idea. De todos modos un te verde natural nos pude tener en marcha toda la velada y nos permite regular el nivel de azúcar que le queremos añadir, pues alguna cantidad quizá deberemos consumir si queremos aguantar hasta el alba.
Otra alternativa es tirar de café americano, que en verano combina muy bien con el hielo y nos mantendrá bien despiertos además de hidratados. Opcionalmente podemos tomar cerveza 0,0, que garantiza la ausencia de alcohol y tiene unos seis gramos de azúcar procedente de la cebada, una cantidad bastante aceptable. También tenemos las bebidas carbonatadas 'zero', que usan edulcorantes artificiales.
Aunque no está claro si engordan o no, en principio su poder calórico es mucho más bajo. Finalmente, cómo no, nos queda la opción de recurrir al agua. Con o sin gas, y una rodajita de limón o pepino, está deliciosa.
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