Si no ves este contenido puede deberse a la carga en tu dispositivo móvil. Haz clic aquí para recargar la página.
Aunque las personas sentadas en medio de un atasco puede que no estén de acuerdo, los datos indican que cada vez hay menos conductores. Según las Estadísticas de la DGT, el censo de conductores pasó de unos 19 millones en 2017 a 16 millones en 2020. Parte de este cambio se debe a que menos jóvenes se están sacando el carnet de conducir, y esto también refleja un cambio en las costumbres de movilidad.
Según un estudio de Uber, esto se explica por el aumento de otras opciones, alternativas de movilidad, especialmente en las ciudades, como el transporte público, compañías de VTC como la propia Uber, los patinetes, bicicletas y coches eléctricos de alquiler, y el elevado coste de tener un coche en propiedad.
Otra de las opciones que ha ganado popularidad en los últimos años son los modelos de suscripción. Tener un coche es caro porque, además del coste inicial del coche y de su financiación, los seguros y el mantenimiento pueden llegar a sumar una cantidad importante de dinero cada año. Además, los coches se deprecian con mucha rapidez.
Así funcionan los coches por suscripción
Los coches por suscripción son vehículos sujetos a un contrato con el cual se pagan cuotas durante un periodo de tiempo determinado, que pueden ser unos pocos meses o varios años. Durante ese tiempo, la empresa se encargará del seguro a todo riesgo, los gastos de matriculación, los impuestos, el mantenimiento preventivo del coche, las ITV, la revisiones y las reparaciones. Es decir, no hay que pagar nada aparte de la cuota mensual.
La diferencia con otra opción popular entre empresas y autónomos, el renting, es que este último requiere un tiempo de permanencia de entre 24 y 48 meses, y por lo general, una entrada inicial. Sin embargo un coche de suscripción se puede obtener solo durante los meses de verano, por ejemplo. No suele haber periodo de permanencia. Otra de las ventajas de este modelo es la posibilidad de cambiar de modelo de coche pagando la diferencia del coste de la suscripción.
Suscripción o en propiedad
Para determinadas personas todavía puede resultar rentable tener un coche en propiedad, especialmente si hacen muchos kilómetros y piensan conservarlo durante muchos años. Muchas de las empresas de suscripción limitan el número de kilómetros, por ejemplo, a 1.500 km al mes, y cobran por el kilometraje extra.
Teniendo en cuenta que el coste del combustible siempre será el mismo, estos son los factores que hay que tener en cuenta para poder comparar el coste mensual con el de un coche en propiedad:
- ITV: dependiendo de la antigüedad del vehículo, se pasa cada 4 años, cada 2 años o anualmente, y será necesario hacer las revisiones necesarias.
- Revisiones: durante los primeros años tras la adquisición de un vehículo nuevo, serán obligatorias para mantener la vigencia de la garantía. Se recomiendan las revisiones periódicas anuales y nunca más de tres años.
- Mantenimiento: algunos componentes de los coches, especialmente los de combustión interna, sufren desgaste y deben ser reemplazados periódicamente, en especial aceite, filtros, neumáticos, correas y frenos.
- Seguro obligatorio: es un requisito legal imprescindible en cualquier vehículo y cubre el daño a terceras personas y propiedades, pero puede resultar conveniente disponer de una cobertura mayor, que incrementa el precio.
- Impuestos: hay que sumar los impuestos municipales de circulación y otros impuestos especiales por cada comunidad autónoma.
También es importante tener en cuenta si hay temporadas en las que no vamos a usar el coche en absoluto, lo que haría que la suscripción fuera más atractiva, ya que se puede suspender durante ese tiempo. Con estas cuentas y calculando la vida media útil del coche, que está en una media de 13 años en España, es posible saber si el modelo de suscripción es para nosotros.
Opciones de suscripción
Estas son algunas de las empresas que ofrecen servicios de suscripción en España:
- Wabi: es un servicio de la financiera del Santander, que entrega los coches en 48 horas y permite darse de baja sin penalización. El paquete incluye asistencia en carretera y está presente en 22 provincias. Hay vehículos disponibles desde 249 euros al mes.
- Bipi: dispone de más de 40 modelos de coches diferentes y tiene un periodo mínimo de tres meses e incluye 1.000 km mensuales que se pueden ampliar. Los modelos más económicos empiezan por 315 euros al mes.
- Astara: antes Cardive, esta empresa ofrece vehículos nuevos desde 349 euros al mes en planes con una duración mínima de nueve meses y cuyos precios aumentan a medida que el periodo de suscripción es menor.
- Carcloud: esta empresa incluye 1.000 km al mes en el precio de la suscripción y dispone de coches desde 299 euros al mes. El seguro es con franquicia, que se puede eliminar aumentando el precio de suscripción.
- Mocean: este servicio del fabricante Hyundai ofrece vehículos de la marca desde un mínimo de tres meses y 299 euros al mes, y cuenta con diferentes opciones de kilometraje.
- Revel: un servicio multimarca que dispone de coches desde 375 euros al mes y que los entrega en casa como la mayoría de estas empresas.
La decisión de tener un coche en propiedad o uno de suscripción no solamente se reduce al coste. Para algunos, las ventajas de la flexibilidad, la comodidad y la oportunidad de conducir coches modernos que ofrecen las suscripciones pueden superar las ventajas de la propiedad.