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“¡Hostias! Soy TT [trending topic] por primera vez en la vida y por cuestiones de cultura política transversal”, volvió a compartir Andrés Calamaro en su cuenta personal de Facebook después de comprobar todo el revuelo causado tras afirmar que prefería el “vértigo de los patriotas y reaccionarios” en lugar de a los cuatro principales partidos políticos, PSOE, Unidas Podemos, PP y Ciudadanos. Se trataba de una tesis que apoyaba poniendo como ejemplo “el renunciamiento histórico de Antonio Escohotado” o “la posición incómoda de Fernando Sánchez Dragó”, gestos que, según este, “hablan más que los debates”.
Esta vez ha vuelto a realizar una serie de publicaciones, entre las que ha aprovechado para colar en repetidas ocasiones el cartel de su próxima gira, en las que ha intentado explicar la confusión sobre su supuesto apoyo a la ultraderecha y, concretamente, a Vox. “Soy residente en Argentina, respeto la democracia pero no voto en España. Estoy en el diálogo y siempre amigable con todos los sectores”, ha aclarado a quienes le preguntaban qué papeleta metería en la urna el próximo 28 de abril.
Aun así, su postura tampoco ha variado. El cantautor asegura que suya “es la columna del pueblo, los intelectuales y los toreros, entre otros colectivos”, y que “darle variedad al Congreso es el reflejo de la realidad”. Además, cuestiona “las tradicionales alas de la derecha y la izquierda” y afirma que este es “un escenario de bancos y de Bruselas, un mundo global que defiende las tradiciones mientras que las suprime igualando lo distinto”.
Asimismo, aunque en la publicación original se mostraba reacio a dar el voto a quienes van a “repartirse los presupuestos de las elecciones y la gestión del Estado”, en referencia a los cuatro líderes políticos que debatieron en Atresmedia, en esta ocasión ha añadido que está en “buena sintonía personal con todos los candidatos de la democracia española”.
“Albert Rivera se ofrece a blindar la soberanía empresarial española, Pedro Sánchez busca la gobernabilidad, Pablo Casado es un buen candidato popular y respeto a Pablo Iglesias que es inteligente. No dudo de las buenas intenciones de nadie”, apunta el artista. Solo hay uno con el que dice no simpatizar “por razones evidentes que no son el calentamiento global ni el equilibro ecológico”. Es decir: Pacma.
Calamaro también se ha mostrado preocupado en materia económica animando a posicionarse “más allá de gestos progresistas” mientras pone como ejemplo el escenario en Argentina. “Agobiados por otro quiebre de la economía, inflación y devaluación. Quizás tenemos que aprender a que derecha votar, suponiendo que tampoco existen, realmente, propuestas tradicionales de izquierda racionalista ni marxista, ni un proyecto conservador liberal de garantía”, asegura.
Por ello, afirma desde su cuenta de Facebook que “Internet no es un espejo donde mirarse”, sino que hay que poner la mira sobre “el anterior escenario electoral”. “Mía es la cultura, la popular y la propia, el campo y la ciudad, los pueblos y los continentes, las tradiciones y la modernidad, el fútbol y comprar la comida para cocinar. Todas las calles. Lo que conocemos como pueblo. Ahora me comparan con Joaquín Sabina que es un genio, algo que nunca me había pasado”, sentencia el cantautor en uno de sus múltiples textos.
En el último de ellos ha publicado un poema titulado Virtudes Virtuales en el que se puede leer que “en la pantalla no existen buenos modales” mientras que, al mismo tiempo, defiende la libertad de hablar sin tapujos: “Que lindo es vivir la vida diciendo lo que me gusta. El escarnio no me asusta”.
“Soy criado socialista, feminista y ateo”
Pero Andrés Calamaro no solo ha dado explicaciones a través de redes sociales. El cantante también ha hecho declaraciones a través de un audio en el programa de Cuatro Todo es mentira, donde se ha declarado como “un hombre de la izquierda racionalista, un ácrata y liberal” afirmando tener “amigos en todos los sectores”.
Posteriormente, se ha disculpado por si la publicación de “el vértigo de los patriotas” se interpretó “de forma muy extrema”. Recalcando además que es “criado socialista, feminista y ateo”, y que por ello responde “a estos valores” respetando “todos los rincones de España”. “Viajo mucho por todas las regiones, los idiomas, las identidades y la tauromaquia”, apunta.