Manolo y Manuel. El relevo se ha completado. Manuel Segade, de 46 años, sustituye a Manolo Borja-Villel, de 65, en la dirección del Museo Reina Sofía. Un concurso internacional ha sentenciado una transición complicada y polémica que se ha retrasado más de lo previsto. Medio año después del final del contrato de Borja-Villel, este lunes se ha puesto punto final al pasado. Y el sector parece satisfecho con el futuro. Los diferentes agentes de la mesa sectorial consultados por este periódico definen al nuevo director del centro como un experto “dialogante” y conocedor del arte actual español. Y lo que parece muy relevante, Segade es un gestor desde la periferia, que ha participado en el tejido social de Móstoles (Madrid), desde la dirección del Centro de Arte Dos de Mayo de la Comunidad de Madrid.
Este dato parece decisivo para la mayoría de las fuentes consultadas, porque vaticinan un perfil para los próximos cuatro años que llevará a la institución que conserva El Guernica de lo más local a lo más internacional. Una de las personas que mejor conocen a Manuel Segade es Imma Prieto, actual directora del centro Es Baluard, en Palma de Mallorca, que acaba de ser nombrada directora de la Fundación Tàpies. La primera virtud que se le viene a la mente es su “gran actitud dialogante, con la que resuelve cualquier tipo de conflicto”.
“Estoy convencida de que aportará una nueva perspectiva para entender la colección del museo, en la que tendrá un lugar protagonista la descolonización de los cuerpos. El cambio generacional será evidente en esta mirada”, avanza Prieto. De hecho, Segade se encontrará con una presentación de la colección que no es del todo permanente. Tal y como ha podido saber elDiario.es, al menos el 20% de las obras expuestas incluidas en la colección permanente son préstamos. Tarde o temprano, desaparecerán del relato que confeccionó Borja-Villel.
La casa de los artistas españoles
Para Imma Prieto es relevante también el conocimiento del contexto del arte actual que tiene Segade, aunque no participa de la corriente de opinión que señala a Borja-Villel como ciego ante las experiencias más contemporáneas del país. Para el sector, el exdirector ha convertido el museo en un referente internacional, gracias a las colaboraciones con instituciones de todo el mundo. “Ahora es el turno de reforzar y lanzar el papel de los artistas españoles en el extranjero, de la mano del Museo Reina Sofía con intercambios”, explica Isidro López Aparicio, artista y portavoz de la Unión de Artistas Contemporáneos de España en la mesa sectorial.
“El nombramiento en una noticia muy positiva. Segade ha demostrado en el CA2M una capacidad de gestión muy interesante, que aprovechará para actuar en un organismo más complejo. Es un muy buen profesional, que conoce a los artistas españoles. Hasta el momento, la presencia de los artistas ha estado limitada a los gustos personales del anterior director. Necesitamos una mirada menos personalista y más heterogénea. Hasta ahora los artistas se acercaban al museo y lo veían como algo imposible. Pero el Museo Reina Sofía debe ser la casa de los artistas españoles. No somos chovinistas, pero hasta el momento parecía más sencillo acceder al Museo Reina Sofía si eras extranjero. Yo creo que Segade va a hacer posible que los artistas españoles se sientan como en casa”, declara López Aparicio. Este periódico se ha puesto en contacto con Rafael Peñalver, presidente de Artistas Visuales Asociados de Madrid (AVAM), pero ha preferido declinar la valoración sobre el nombramiento.
Idoia Fernández es la presidenta del Consorcio de Galerías españolas de Arte Contemporáneo y piensa que Manuel Segade es un profesional “muy preparado, muy capaz y muy inteligente”. Fernández y Segade comparten reuniones en la mesa sectorial, porque él es presidente de la Asociación de Directores y Directoras de Arte Contemporáneo de España (ADACE). Le gusta el punto de vista de Segade, “con una capacidad de análisis muy acertada”. Lo que más valora del nuevo director del Museo Reina Sofía por los próximos cuatro años es que “conoce muy bien el sector y el entramado” y que tiene mucha experiencia con la administración. “La anterior dirección podía haber estado más en contacto con la plástica española. Sí he tenido la sensación de que en el Museo Reina Sofía faltaba esto y es una impresión compartida por el sector. Borja-Villel ha colocado al museo en una referencia internacional y quizá Segade pueda usarlo para lanzar los valores nacionales afuera”, añade Fernández.
Una nueva cúpula
Este periódico ha podido saber, a través del Ministerio de Cultura, que el nuevo director tendrá la posibilidad de configurar una cúpula a su medida. No tendrá que heredar la creada y consolidada en el último momento por Manuel Borja-Villel. El contrato de dirección está asociado a cinco nuevos contratos de alta dirección que podrá usar para conformar y defender el proyecto de museo que ha sido aprobado por el jurado internacional. En las bases se valoraba la perspectiva feminista. Y su nombramiento es aplaudido también por la asociación Mujeres en las Artes Visuales (MAV). “La igualdad no ha sido uno de los fuertes de la anterior dirección y estamos convencidas de que Segade está comprometido con la presencia femenina. En el Museo Reina Sofía falta paridad. Hay mucho que hacer y un perfil como el suyo va a ser decisivo para los tiempos que podrían venir a partir del 23 de julio”, explica Maribel Domènech, presidenta de MAV, ante la posibilidad de un resultado electoral desfavorable a las políticas de igualdad.
Por eso desde MAV reconocen haberse “alegrado mucho” cuando conocieron el nombramiento de Segade, con una larga trayectoria: “Las mujeres artistas no se merecen la invisibilidad de los museos públicos españoles y el Museo Reina Sofía debe mejorar mucho en este sentido”, añade Domènech. También están contentos con el nombramiento en el Instituto de Arte Contemporáneo (IAC). Su presidente es el galerista Adrián Piera y cree que Manuel Segade es una persona “estupenda en la distancia corta y en lo profesional, atrevido y brillante”. “Le pedimos que exporte nuestros valores al extranjero, sin caer en el catetismo. Está muy bien que el museo esté en el mapa internacional, pero ahora debemos dar a conocer nuestro producto artístico. Segade conoce el producto interior, es una persona muy sensata y muy fino en sus análisis”, asegura Adrián Piera. “Ha sido un acierto total. No será una ruptura con la etapa de Borja-Villel, pero sí hará una revisión con mayor presencia del arte español. Hemos acabado un poco cansados de ser la bisagra con Latinoamérica y no atender a lo propio. Es hora de abrir el foco”, sostiene el presidente de IAC.