La Biblioteca Nacional del Reino Unido presentó hoy la que será su exposición estrella de la temporada, “Mapas y el siglo XX: Marcando las fronteras”, una nueva visión de la historia de los últimos cien años a través de 200 mapas.
Desde mañana y hasta el 1 de marzo del próximo año, esta selección de mapas, de entre los más de cuatro millones y medio que tiene en propiedad la biblioteca londinense, serán expuestos para otorgar al visitante una perspectiva distinta de los principales acontecimientos del siglo pasado.
Un nuevo mundo, guerra, paz, mercados y el movimiento son las cinco zonas en las que se divide la exposición en la que, en palabras de su comisario, Tom Harper, “veremos cómo a lo largo de los años los mapas han marcado nuestra forma de entender y darle forma al mundo en el que vivimos”.
“¿Quién no utiliza hoy en día Google maps para llegar a un sitio?”, se preguntó hoy ante la prensa Harper para apuntar que “fue en el siglo XX cuando los mapas comenzaron a formar parte esencial en el día a día de las personas”.
Algo a lo que contribuyó el abaratamiento tanto de su coste de producción como de mercado y el que la asignatura de geografía se convirtiera en obligatoria.
Harper explicó cómo los mapas pueden tener un carácter eminentemente práctico, reflejar la realidad para tratar de entenderla mejor o, lejos de intentar resultar pragmáticos, pueden ser metafóricos, alegóricos o imaginarios.
En la muestra, se exhiben ejemplos de los primeros, como el mapa del metro de Londres que Harry Beck diseñó en 1931 en el que redujo el esquema del suburbano a sus formas geométricas más simples, utilizando únicamente líneas verticales y horizontales, y puntos para que los pasajeros lo entendieran mejor.
Y también de los segundos, especialmente en la sección de paz, donde un enorme mapa del país de las hadas preside la sala o, el favorito de Harper, un mapa de una divertida e imaginaria isla del desayuno, creada por Cyril Phillips en 1953.
El papel de estas representaciones desde un punto de vista estratégico y de operaciones queda también patente en la recopilación, donde pueden apreciarse mapas militares de alta precisión que fueron herramientas esenciales durante las dos guerras mundiales del siglo XX.
En la zona de guerra de la exposición pueden verse, además, diferentes mapas propagandísticos que trataban de influir en la sociedad para posicionarse en uno u otro bando durante los conflictos.
Durante los años cincuenta del pasado siglo la economía comenzó a crecer y los mapas, aseguró Harper, tuvieron un importante papel a la hora de crear opinión sobre las diferentes corrientes económicas como marxismo o neoliberalismo, de los que se encuentran distintos ejemplos en la sección de mercados de la exposición.
La tecnología empleada para la elaboración de los mapas se vuelve más sofisticada a medida que pasan los años y en la década de los noventa los mapas vía satélite ocupan un lugar destacado.
Así, “El mundo desde el espacio” del año 1990 que puede verse en la biblioteca londinense es supuestamente el primer mapa vía satélite de la tierra entera desde el espacio.
Aunque, antes de eso, en 1959, la nave soviética bautizada como Luna 3 fue la primera en llegar a la cara oculta de este satélite y, con las fotografías que hizo, en el año 1962 se hizo el primer mapa completo de la luna incluido en la exhibición.
Además de la muestra permanente, durante los cuatro meses que durará la exposición se desarrollará un programa cultural.
Mapas fantásticos que van desde el mundo de Winnie de Pooh al universo de los reinos de Juego de Tronos, propaganda británica de la II Guerra Mundial o mapas que reflejan cómo el tren conquistó el mundo son solo algunos ejemplos de lo que podrá verse de manera temporal.
“La tecnología, la variedad y la influencia en la sociedad de los mapas queda patente en esta exposición que, por primera vez, hace un recorrido de la historia del siglo XX desde esta perspectiva”, concluyó Harper.