Disney ficha a una Ariel negra para 'La Sirenita' y aunque parezca mentira sigue molestando
El miércoles por la noche Disney dio un vuelco a todo el imaginario de su factoría y anunció que su próxima Sirenita de carne y hueso será negra. La cantante y actriz Halle Bailey, de 19 años, interpretará a Ariel en la batería de versiones live-action que se han propuesto lanzar en menos de cinco años, y la reacción no se ha hecho esperar.
“Después de una larga búsqueda, quedó bastante claro que Halle posee esa rara combinación de espíritu, corazón, juventud, inocencia y sustancia, más una voz gloriosa para cantar. Todas las cualidades intrínsecas necesarias para desempeñar este icónico papel”, declaró el director y productor de la película, Rob Marshall, en un comunicado.
Esta decisión es un paso adelante respecto a la creación de personajes diversos en animación y CGI como Tiana y Moana. Es la primera vez que Disney abandona el whitewashing, por el que ya recibió críticas en el remake de Aladdin y la última de Rompe Ralph, y elige a una princesa afroamericana tras más de 22 años, cuando la cantante de R&B Brandy fue Cenicienta en un telefilme de 1997.
Pero los detractores no han tardado en acusar a la casa del ratón de romper la línea que venían marcando con La bella y la bestia, La bella durmiente, Maléfica e incluso Aladdin -aunque Naomi Scott no tiene raíces árabes sino africanas-. Resulta curioso, sin embargo, que la elección de Will Smith como el genio de la lámpara resultase tan popular aunque el personaje se relacione siempre con Robin Williams, quien prestó su voz en la original.
Una de las primeras en aplaudir el cásting de Bailey fue la actriz Zendaya, quien se tuvo que enfrentar a críticas parecidas cuando fue fichada para ser Michelle Jones (apodada también como MJ en referencia a Mary Jane) en la nueva saga de Spiderman. Algo que ya ocurrió con Kinping en Daredevil , Nick Furia, a quien ya cuesta separar del rostro de Samuel L. Jackson, y con el mismo Spiderman animado en la cinta Un nuevo universo.
La nueva Sirenita es noticia -de hecho, horas después sigue siendo TT- porque lo más normal sería advertir lo contrario. El blanqueamiento conocido como whitewashing, cuando se sustituye en el reparto a un personaje asiático, latino o afroamericano por un actor blanco y anglosajón, sigue primando en Hollywood.
Sin alcanzar la veintena, Bailey liderará uno de los clásicos más queridos de Disney y lo hará a las órdenes del director de Mary Poppins Returns y de Chicago, con la que ganó el Oscar en 2003. Rob Marshall también ha fichado a Melissa McCarthy en el papel de Úrsula y Jacob Tremblay (Wonder, The Room) para la voz del pez Flounder. A su vez, Alan Menken volverá a coger la batuta de 1990 para la nueva banda sonora como ya hizo con la versión animada y en carne y hueso de Aladdin.