España inspeccionará el yacimiento de la fragata Nuestra Señora de las Mercedes en una expedición dirigida desde el Ministerio de Cultura que comenzará hoy, día 18, y durará hasta el 24 de agosto. La intención de la misión es comprobar lo que han dejado los arqueólogos submarinos de la empresa cazatesoros estadounidense Odyssey después de que expoliaran los restos del barco en 2007.
Según el Museo Nacional de Arqueología Subacuática (Arqua), cuyo director, Iván Negueruela, es el responsable de este proyecto, esta expedición cuenta con militares del Museo Naval y científicos del Instituto Español de Oceanografía (IEO). Será a bordo del buque Ángeles Alvariño, con capacidad para 14 tripulantes y 13 científicos en sus 46,7 metros de eslora, desde donde se realicen las investigaciones. Otro vehículo de apoyo remoto, denominado ROV Liropus 2000, será el encargado de llegar hasta la embarcación hundida.
Odyssey encontró hace ocho años el barco hundido en la zona del golfo de Cádiz con unas 500.000 monedas de plata y oro (reales de a ocho y escudos, todos ellos de la época de Carlos IV y acuñados en Lima, Perú en 1803). Además, en el tesoro iban incluidos otros objetos que, junto con las monedas, fueron llevados a EEUU. Fue en ese momento cuando comenzó un litigio entre España y la empresa norteamericana por los derechos del hallazgo.
En 2011 un tribunal de Atlanta (EEUU) ratificó la orden de un juez de Florida para que la empresa entregara el tesoro a España. Odissey entonces presentó un recurso contra la sentencia, que fue desestimado. En 2012, en un fallo del Tribunal Supremo de Estados Unidos rechazó el recurso de Odyssey y obligó a la compañía a devolver a España las monedas.
Sin embargo, no todos los restos extraídos del pecio fueron devueltos inicialmente. Como consecuencia de la investigación judicial se supo que los responsables de Odyssey habían ocultado parte del tesoro en Gibraltar. Estos restos fueron finalmente entregados en julio de 2013 y llevados junto con los anteriores al museo Arqua de Cartagena.
Hundido por Reino Unido
El navío Nuestra Señora de las Mercedes fue una fragata perteneciente a la Armada Española, botada en el puerto de La Habana en 1786 y que formaba parte del convoy que cubría la ruta comercial entre las colonias de América y España, amenazada frecuentemente por navíos del Reino Unido.
El 5 de octubre de 1804, y pese a que eran tiempos de paz entre las dos naciones, se produjo la Batalla del Cabo de Santa María, que tendría como consecuencia el hundimiento de la fragata. En el naufragio de fallecieron 249 marineros. Los 51 supervivientes fueron hechos prisioneros y trasladados al Reino Unido. Este hecho tuvo como consecuencia el final del acuerdo de paz entre Inglaterra y España, convirtiéndose en el preludio de la Batalla de Trafalgar.