En 2011, cuando se celebró la primera edición del Dcode, sus organizadores lo vendieron utilizando dos argumentos principales. El primero es que iba a ser el festival de Madrid, que carecía de uno propio tras varios intentos desastrosos de consolidar un espacio musical anual de este tipo. El segundo era no tener una identidad, es decir, no estancarse en una única oferta musical para atraer al mayor número de público posible. Esta exagerada apertura del abanico provocó que en junio de ese año compartiesen escenario bandas tan dispares como Eels, My Chemical Romance, Band of Horses y Sum 41.
Tres años después, el festival continúa con esta apuesta. Las insinuaciones que surgen cada año de que acabará siendo el acontecimiento musical pop del año, buscando a ese público fiel a las radiofórmulas y cada vez más organizado en Internet, quedaban en nada siempre que se conocían dos o tres confirmaciones. El rechazo de la organización a esa etiqueta maliciosa ha sido potenciado en la edición de este 2014: grandes grupos y solistas, pero sin un peso considerable a nivel internacional, que son capaces de ofrecer buenos conciertos. Y que no parece que atraigan mucho a los adolescentes.
Entre todas las bandas y cantantes que estarán en este Dcode 2014, hay cinco que destacan por su repertorio y su puesta en escena. Una selección en la que no está la que quizá sea la más conocida de todos, La Roux, que por ser la mainstream de la jornada centrará todas las miradas. Pero que por su calidad merecen tanta atención o más, aunque resulten desconocidos.
Beck
A falta de un gran conjunto internacional, el músico californiano es el auténtico cabeza de cartel en esta edición. Con más de 20 años de carrera, el eclectismo de Beck sorprenderá a aquellos que no le hayan escuchado en profundidad o no le hayan vivido en directo. Y es que sus temas tocan casi todos los palos, ya que se atreve con el folk, el soul o hasta el country. Además, lo tiene fácil para gustar al público, ya que también puede tirar de su lado indie. Su problema: es un desconocido para un gran sector del público, algo que puede disuadir a muchos.
CHVRCHES
La electrónica pop, ese género que existe desde hace décadas pero que nunca aparece nombrado con todas las letras, ha sido desde hace un par de años la gran apuesta del Dcode. La presencia de CHVRCHES lo atestigua, y su presencia en las primeras filas del cartel les convierte en una de las atracciones principales. El trío escocés en el que todos le dan al sintetizador tiene grandes recursos gracias a temas como The Mother We Share o Gun, en los que la dulce voz de Lauren Mayberry llamará la atención. Lo que juega en su contra es su poco tiempo juntos, así como su limitado registro.
Anna Calvi
La lista de elogios que acumula la solista británica es inmensa, razón que justifica de sobra que vaya a contar con una hora en el festival. Pero que nadie espere un momento de catarsis con su concierto. Calvi representa el momento más tranquilo y sosegado de todo el Dcode. Unos minutos en los que cantar junto a ella, y que pueden aprovecharse para descansar de los saltos previos y prepararse para los siguientes. Que su rol esté tan definido podría provocar que se la tachase de ser la “sosa” de la noche. Por suerte para ella, una española que ha estado muy en boca estos últimos días ya ostenta dicho título de antemano.
Jake Bugg
La juventud, el ritmo y los saltos los pondrá el jovencísimo Jake Bugg, que bien podría pasar por uno de los imberbes adolescentes que acudirán al festival. Su cara de niño le hace parecer poco maduro y hasta inseguro cuando se le ve por primera vez en un escenario. Todo cambia cuando comienza el torrente de riffs de guitarra, con canciones que recuerdan a Reino Unido en cada nota y que probablemente causarán uno de los momentos más alocados y divertidos del evento. Jake Bugg tiene todo para convertirse en la nueva sensación del rock británico gracias a sencillos como What Doesn't Kill You. Aquellos que tengan cierta predilección por Miles Kane o Arctic Monkeys que no le dejen escapar.
Digitalism
Si como todo apunta son de los últimos en saltar al escenario, el Dcode 2014 podría tener uno de los cierres más espectaculares de su corta historia. Este dúo alemán, caracterizado por un indie que tiene escarceos con la electrónica y el dance, será una de las sorpresas del sábado. Los que quieran saltar y pasar uno de los mejores ratos tienen que dejar todo lo que estén haciendo cuando les vaya a tocar a ellos. Las razones: sintetizadores empleados de maravilla que logran temas pegadizos, con mezclas potentes acompañadas de la voz de Jens Moelle, que no para en ningún momento. La diversión está asegurada con Pogo, Circles o Blitz, entre otras.