La portada de mañana
Acceder
El jefe de la Casa Real incentiva un nuevo perfil político de Felipe VI
Así queda el paquete fiscal: impuesto a la banca y prórroga a las energéticas
OPINIÓN | 'Siria ha dado a Netanyahu su imagen de victoria', por Aluf Benn

Los seis momentos más locos de los VMA

La gala de los MTV Awards fue un escándalo. Nada raro si se tiene en cuenta la tendencia de ediciones pasadas. “The show must go on”, decía Freddy Mercury. Anoche, desde el Microsoft Threatre, hicieron buena la máxima del cantante británico y, un año más, el espectáculo primó sobre la música. Ya en otras ediciones se pudo ver a Madonna comiéndose la boca con Britney Spears y a Miley Cyrus bailando con Robert Thicke una coreografía más propia de un club nocturno que de una gala de premios.

1. Lo de Miley Cyrus

Dejando a un lado el morbo, la parte musical centró todos sus focos en Taylor Swift. La de Pensilvania se alzó con tres galardones (estaba nominada a nueve), entre ellos el de mejor vídeo del año por Bad Blood. Otra canción suya, Blank Space, recibió los dos restantes. Bruno Mars, Nicki Minaj, Fallout Boy, Snoop Dogg y OK Go, entre otros, también se hicieron con premios. Pero más allá de los artistas ganadores, si hubo alguien que sobresalió sobre el resto, esa fue Miley Cyrus.

La antigua Hannah Montana, hoy reconvertida en estrella mediática del despelote, la polémica y adalid de la rebeldía adolescente, condujo la gala entre medios vestidos, retazos de tela adosados a su cuerpo y chascarrillos insípidos, que en Twitter no tardaron en prender generando un incendio virtual que a punto estuvo de calcinar por completo a la cantante. También seleccionó una muestra de vídeos absurdos para proyectar entre actuación y actuación, que no terminó de gustar ni al público allí presente ni al virtual-tuitero. Y esto no había hecho más que empezar.

2. Taylor Swift vs. Kanye West (y su señora)

Hace seis años Taylor Swift subía al escenario del Radio City Music Hall de Nueva York a recoger el premio al mejor vídeo por You Belong With Me. Minutos más tarde, Kanye West le sacaba el micro para recriminar al público asistente que hubieran preferido la canción de Swift a las Singles Ladies de Beyoncé.

La venganza es un plato caliente que se sirve bien frío. Y la pasada noche la rubísima reina del pop le entregaba a West el premio honorífico Michael Jackson Video Award, levantando el fervor de los tuiteros. Siempre perfecta, Swift dedicó alguna palabra de agradecimiento al rapero, que acto seguido habló durante algo más de diez minutos, no para pedir perdón por aquel incidente del 2009, sino para recalcitrarse. “El problema era la contradicción. La contradicción es que yo lucho por los artistas, pero en esa lucha fui irrespetuoso con los artistas de alguna manera”, manifestó el de Atlanta.

3. Kanye West for President

Esto también era solo el principio. Durante el emotivo largo discurso, cargado de ego, empezó dándole las gracias a Taylor Swift por la entrega de la estatuilla, habló sobre el panorama musical, los nuevos artistas y las audiencias que iba a conseguir MTV emitiendo el momento de la entrega del premio honorífico una y otra vez: “Moriría por el arte, por lo que creo. El arte nunca puede ser educado”. Usó la muletilla bro (hermano) en varias ocasiones y aseguró que ojalá pudiera “no gustar tanto a la gente”, a lo que acto seguido exclamó: “¡Que les follen!”.

Kanye West confesó no entender las galas de premios y dijo haber fumado alguna sustancia antes de subir al escenario. Aconsejó a todos los allí presentes “escuchar a los niños” porque “son el futuro” y, ya para acabar, hizo una declaración de intenciones: “He decidido que en 2020 voy a presentarme a presidente (de los EEUU)”. Asi nomás.

4. Nicki Minaj vs. Miley Cyrus

Nicki Minaj primero firmó la paz y luego hizo la guerra. La organización la subió a ella junto con Taylor Swift al escenario para que zanjasen una polémica que coleaba desde hacía varias semanas en Twitter. Todo bien: cantaron juntas, reinó la armonía y un abrazo final selló la nueva amistad entre ambas divas.

Sin embargo, a Nicki Minaj le faltaba algo de salsa. Así que cuando volvió al escenario a recoger el premio al mejor vídeo de hip-hop por Anaconda, la cantante empezó dando las gracias a sus chicas, a sus chicos y queriendo a todo el mundo. “Y ahora, volviendo a esa puta que tenía tanto que decir sobre mi en la prensa el otro día... ¿Qué pasa Miley?”, dijo Minaj. A lo que una Cyrus atónita, saliendo al paso como pudo, contestó: “Nicki, todos estamos dentro de la industria, todos hacemos entrevistas y todos sabemos cómo lo manipulan”. La presentadora echó balones fuera y culpó a la prensa por tergiversar su entrevista en el New York Times.

5. El striptease Rebel Wilson

Antes de recoger el premio, Nicki Minaj estuvo bailando con Rebel Wilson. La actriz estadounidense presentó la categoría de mejor vídeo de hip-hop y apareció vestida de policía. “Muchas personas tienen problemas con la policía, por eso odio a las strippers policía”, dijo Wilson. Luego se quitó la ropa, dejando al descubierto una camiseta en la que se podía leer 'Que les den a las strippers policía'.

Rebel Wilson también aseguró que “Contraté a una para el 80 cumpleaños de mi abuela. Tuve que pagar un extra de 100 dólares por que le diese un masaje en la espalda, pero solo duró el tiempo de una canción”. Luego cogió de la mano a Nicki Minaj y juntas bailaron un poco de twerking.

6. El momento de Tori Kelly

La cantante estadounidense, con apenas 22 años ya es todo un ídolo de masas en EEUU. Prueba de ello fue la actuación que protagonizó, cantando su hit Shoud've been us y que puso a la comunidad tuitera del revés, gracias al chorro de voz de la cantante y el desparpajo con el que se mostró sobre el escenario del Microsoft Threatre. De lo mejorcito de los VMA 2015.

Bonus Track: el pezón de Miley Cyrus

No podía faltar algo de chicha en forma de erotismo y nadie mejor que Miley para esos menesteres. En mitad de la gala, mientras el plano se abría enfocando al escenario, el realizador mostró una imagen de la presentadora entre bambalinas sin la parte de arriba de su vestido. Durante un segundo muy largo, todo el mundo pudo contemplar el pezón de Miley Cyrus.