Ismael Rodríguez, el cazador de 28 años y vecino de Vacarisses (Barcelona) que el pasado sábado mató a tiros a dos agentes rurales en un coto de caza de Aspa (Lleida), ha pasado esta mañana a disposición del juez.
Rodríguez, autor confeso del crimen, ha sido llevado por los Mossos d'Esquadra a los juzgados a primera hora de la mañana en una furgoneta.
El cazador llevaba detenido desde el sábado por la mañana, después de que fuera él mismo el que llamara al 112 para alertar de que había matado a dos agentes rurales.
Los hechos pasaron en un coto privado de caza del municipio leridano de Aspa cuando los dos agentes se acercaron al cazador para solicitarle la licencia de la escopeta que llevaba, en un control rutinario de los que realizan habitualmente los agentes rurales.
El cazador les disparó con su escopeta en la cabeza, causándoles la muerte al instante, en un acto que el propio acusado no se explica, ya que, según su declaración a los Mossos, no hubo discusión con los agentes y les mató sin saber por qué.
Aún está por aclarar si el cazador disparó dos tiros a cada agente, ya sea porque tenía el arma trucada -pues mecánicamente sólo se pueden disparar tres cartuchos consecutivos-, o porque volvió a desbloquear el arma, o bien si, como dijo inicialmente el conseller de Interior, Jordi Jané, realizó solo tres disparos.