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Entrevista Actor

Peter Dinklage: “Los romances en el cine siempre han sido para gente guapa y blanca”

Javier Zurro

8 de marzo de 2022 22:32 h

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“Érase un hombre a una nariz pegado, érase una nariz superlativa”, escribía Quevedo para reírse de Góngora en el siglo XVII. Mofarse del físico de alguien es un clásico. Hasta la literatura de hace 400 años lo hacía. Los protagonistas de las historias siempre son guapos, altos, carismáticos. Si uno es feo, si es gordo, o si no responde a las normas de belleza del momento, no tiene derecho a ser un héroe. Ni siquiera tiene derecho al amor. Ese estereotipo pernicioso es el que ha perpetuado la literatura y el cine y que ahora se hace fuerte en una sociedad dominada por Instagram. 

Cyrano de Bergerac era otro hombre a una nariz pegado. O al menos así lo describió Edmond Rostand en su popular obra de teatro, estrenada en 1897, que sigue más vigente que nunca. Un escritor con un don para la palabra pero incapaz de acercarse a la mujer que amaba por no considerarse suficientemente guapo. Cyrano ahora no tienen la nariz enorme, sino que tiene acondroplasia. Su habilidad para la lírica sigue intocable, pero ahora mide 1,35 metros. Esa es la altura real de Peter Dinklage, el actor que saltó a la fama por dar vida a Tyrion Lannister y que es la estrella absoluta de Cyrano, el musical de Joe Wright (estreno el 11 de marzo) con el que demuestra que canta, baila y lo que haga falta.

Un papel que ya interpretó en el teatro de Londres y que ahora llega a la gran pantalla. Mantiene la esencia de las canciones creadas por The National, el grupo liderado por Matt Berninger y que con sus composiciones consigue que esta historia clásica acabe supurando notas de rock. En cuanto Dinklage escucha la palabra España abre los ojos y pregunta que de dónde. Se quedó prendado cuando rodó aquí la serie de HBO y antes de comenzar la entrevista subraya que la echa de menos porque es uno de sus países preferidos de todo el mundo.

He leído que tuvo una banda de música, pero no sé si es una leyenda urbana de internet.

Bueno… Es un poco mezcla de todo. Tiene algo de leyenda urbana, pero es verdad que tuve un grupo de música hace mucho. Eso es cierto. Era muy joven y con unos amigos montamos un grupo e hicimos algo de música 'ruidosa' juntos.

Entonces, para usted estar en un musical como Cyrano es un sueño hecho realidad.

Es un sueño inesperado que ha pasado. Estoy feliz de formar parte de esta película. Además, es un proyecto en el que el grupo The National ha hecho todas las letras y todas las canciones del musical, y es uno de mis grupos favoritos. Ya lo era desde antes de empezar este proyecto. Creo que Matt Berninger es una de las mejores voces del rock and roll, y lo que yo debía hacer como actor es intentar no imitarle, que es algo que hacemos todos cuando cantamos canciones de nuestros ídolos, pero es que era un gusto cantar sus canciones.

Usted ya había interpretado el mismo papel en el teatro en Londres, ¿cambia mucho la experiencia al hacerlo en cine?

Es igual de duro, pero sí es cierto que son formas diferentes de arte y tienes que adaptarte a cada una de ellas. No hay nada mejor que el público en directo, eso también te lo pueden decir los músicos. Es como hacer una actuación en directo y grabarla en un estudio, pues pasa lo mismo con el teatro y el cine.

Toda esta cosa competitiva de decidir quién es mejor actor que otro me parece un poco estúpida

La película habla sobre cómo la belleza no es lo más importante, ni la perfección física, no sé si cree que es un mensaje más actual que nunca.

Si me permites ser un poco controvertido… Si miras a todos los romances del cine clásico, siempre han sido territorio para la gente guapa y blanca. Hasta hace poco no hemos podido redefinir ese modelo, y el amor parecía que solo era propiedad de la gente guapa, pero el amor es de todos. Todo el mundo tiene una historia de amor. Entiendo que a veces la gente quiera ir al cine a ver gente guapa, puedo entenderlo, pero ahora estamos derribando esas tradiciones y explorando otras historias de amor diferentes.

Ha estado en toda la lucha por los premios de este año, ¿cómo vive un actor toda la locura de la temporada de premios?

A mí no me gusta estar pendiente de todo eso. Para mí toda esta cosa competitiva de decidir quién es mejor actor que otro me parece un poco estúpida. Pero, dicho eso, por supuesto que es un honor que tus compañeros te reconozcan por un trabajo bien hecho.

En Cyrano ha trabajado junto a Joe Wright, que tiene fama de ser perfeccionista y de cuidar todo al detalle, ¿cómo ha sido la experiencia?

Joe conoce todos los aspectos del arte de hacer cine, y eso es lo que me gusta de los directores. Es el capitán del barco, y eso es lo que se necesita, a alguien con el conocimiento, con la confianza y con un plan creativo. Mucho de lo que pasa en una película se hace antes de que lleguen los actores al rodaje, y él tiene un equipo increíble, además de buena mano con los actores. Confía en nosotros, nos deja hacer nuestro trabajo y nos respalda cuando es necesario. Además, se fija en todos los pequeños detalles, hasta en las texturas de los trajes. Él se fija en eso. Siempre sabe la historia que quiere contar, y eso es lo mejor que le puede pasar a un actor.