Un total de 19.234 supuestos inmigrantes en situación sin residencia legal en España, de los que 2.721 eran menores de edad, fueron detenidos por fuerzas policiales de 26 Estados miembros de la Unión Europea durante la macro operación 'Mos Maiorum' que tuvo lugar en octubre, y más de 11.000 de ellos acabaron solicitando protección internacional. El 2% de las detenciones se produjeron en España.
Así lo recoge el balance oficial al que ha tenido acceso Europa Press de este operativo impulsado por la Presidencia Italiana en el que participó España y que tenía por objeto identificar y detener a inmigrantes sin papeles para, mediante interrogatorio, recabar datos sobre su periplo hasta el país en cuestión que permitan dibujar un nuevo mapa de flujos clandestinos hacia la UE.
Según el informe, en las dos semanas que duró la operación fueron detenidas 19.234 personas en 6.002 actuaciones, de las que 1.538 tuvieron lugar en las fronteras exteriores (9.890 migrantes detenidos) y 4.464 dentro del territorio europeo (9.344 detenciones). Un total de 14.347 eran hombres y 2.166 eran mujeres. Figuran asimismo 2.721 niños y adolescentes.
Estas cifras duplican el número de detenciones realizadas en la operación Perkunas, que tuvo lugar entre septiembre y octubre de 2013 con un propósito similar (10.459 detenciones) y cuadruplica las de la operación Aphrodita, también un macro operativo de cooperación policial europeo que se desarrolló entre octubre y noviembre de 2012 (5.298). Es la mayor realizada en la UE hasta la fecha.
Muchos detenidos provenían de países en conflicto
De las 19.234 personas aprehendidas, más de la cuarta parte, 5.088, procedían de Siria. En número les sigueron los afganos, 1.466, los kosovares, 1.196, eritreos, 1.116, somalís 641 y albanos 587.
La mayoría de los detenidos procedían así de países en guerra o donde no se garantizan los Derechos Humanos. En total, 11.046 solicitaron protección internacional “durante o después de ser interceptados”. La mayoría fueron localizados en las fronteras exteriores (un 40% llegaron en barco), mientras 3.797 de los solicitantes detenidos estaban en territorio europeo y 457 tenían documentación que probaba que ya habían cursado la solicitud.
El informe elaborado por la delegación italiana destaca que fueron detenidas además, 257 personas consideradas 'facilitadoras' de la inmigración irregular, 53 en las fronteras exteriores y 204 dentro del territorio europeo, ocho de ellos en España. Considera así que el objetivos de localizar redes criminales que promueven la inmigración irregular “se ha conseguido”.
Llama la atención asimismo, que de las más de 19.000 personas detenidas e interrogadas, sólo 281 declararon tener como destino final de su viaje España, frente a los 3.013 que dijeron que iban a Alemania o los 1.556 cuyo objetivo era Reino Unido. No obstante, en 9.483 no señalaron a qué país se dirigían.
Un 2% de las detenciones se produjeron en España
En el caso de España, el informe remitido por el Ministerio del Interior indica que fueron detenidos 42 migrantes en las fronteras exteriores y 304 dentro del territorio, cifra que equivale al 2% del total y que dista mucho de las 5.954 personas interceptadas por Italia, las 3.683 de Alemania, las 3.075 de Hungría, o las 1.219 de Austria y las 995 de Reino Unido.
En lo que al análisis de las rutas migratorias se refiere, hace especial mención a la situación en la frontera sur española y alaba que “tanto las patrullas de la policía marroquí en esta zona del Mediterráneo como el alto nivel de colaboración entre España y Marruecos son dos de los pilares que permiten pervenir y combatir la inmigración irregular en esta región”. “Si la intensidad de estas actividades de patrulla y/o el nivel de cooperación se reduce, el número de inmigrantes que llegan a España se incrementará significativamente”, alerta el informe de la presidencia italiana, una vez más bajo la sombra del miedo.
Alerta por las identificaciones por perfiles raciales
La difusión desde la plataforma de Derechos Humanos europea StateWatch de los documentos clasificados sobre 'Mos Maiorum' antes de que la operación arrancase, puso en guardia a ONG de toda la Unión Europea ante la posibilidad de que las fuerzas policiales acometiesen identificaciones en las calles basándose en los perfiles raciales de los transeúntes.
En España, un total de 37 asociaciones, ONG y colectivos de todo el país suscribieron un manifiesto para exigir al Ministerio del Interior garantías de que no se iban a poner en marcha redadas racistas, algo prohibido expresamente. Exigían un compromiso de que los migrantes no iban a ser “sometidos a identificaciones ni detenciones arbitrarias y que bajo ningún concepto” se iban a aplicar criterios de perfil étnico.
State Watch dice en este sentido que si bien el informe de la presidencia italiana hace hincapié en el compromiso de todos los Estados participantes en respetar los Derechos Humanos durante Mos Maiorum, ha recibido alertas desde distintos puntos de la geografía europea, incluyendo España, sobre presuntas identificaciones basadas en perfiles raciales.