El Consejo de Seguridad de la ONU ha decidido retrasar al menos hasta el viernes la renovación del mandato de su misión en el Sáhara Occidental mientras estudia reclamar el restablecimiento de su “plena funcionalidad” tras la expulsión por parte de Marruecos de buena parte del personal civil.
Originalmente, el máximo órgano de decisión de Naciones Unidas tenía previsto pronunciarse este jueves, pero finalmente la votación será como muy pronto el viernes, según han asegurado a Efe fuentes diplomáticas. Los quince miembros del Consejo se reunieron a puerta cerrada para discutir la cuestión y analizar un borrador de resolución preparado por Estados Unidos.
Según el texto, al que tuvo acceso Efe, el Consejo de Seguridad prevé dar un plazo de cuatro meses para que las operaciones de la misión (Minurso) vuelvan a la normalidad y, si eso no ha ocurrido para entonces, considerará nuevamente qué hacer. El texto señala la “preocupación” del Consejo por el hecho de que la operación no pueda llevar a cabo ahora mismo todas sus funciones, aunque evita criticar a Marruecos por ello o medidas concretas.
El embajador ruso ante la ONU, Vitaly Churkin, ha dicho a los periodistas que algunos países consideran que el texto no es lo suficientemente “consistente” y por ello habrá aún más discusiones a nivel de expertos. Churkin, en todo caso, cha confiado en que se aprobará una resolución antes de que a final de mes venza el actual mandato de la Minurso.
La crisis con la ONU
El mes pasado, Rabat abrió una fuerte crisis con la ONU al expulsar a 73 empleados civiles de la misión, que ahora sólo dispone de 28 y ha visto sus actividades muy limitadas. Esa y otras decisiones se tomaron en respuesta a varias declaraciones y gestos del secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, durante una reciente visita a la región, considerados por Marruecos como “hostiles e insultantes”. El secretario general de las Naciones Unidas habloó de “ocupación”, lo que enfadó al reino alauí.
Pese a ese movimiento, el Consejo de Seguridad ha evitado hasta ahora dar un respaldo claro y público a Ban frente a Marruecos, algo de lo que el Frente Polisario ha responsabilizado repetidamente a Francia, el tradicional aliado de Rabat en el Consejo y uno de los cinco miembros con capacidad de veto.
El embajador francés ante la ONU, François Delattre, aseguró este miércoles antes de reunirse con sus homólogos que su intención es “encontrar un compromiso para un buen texto” que reciba “el mayor apoyo posible”.
Necesidad de que “vuelva a su plena funcionalidad”
El borrador de resolución presentado hoy por EEUU al resto de miembros del Consejo, que aún puede ser modificado antes de la votación, “enfatiza la necesidad urgente de que la Minurso vuelva a su plena funcionalidad” y pide a Ban que en un plazo de 120 días informe sobre los avances en ese sentido.
Además, dice que si para entonces no hay esa “plena funcionalidad” el Consejo considerará “la mejor forma de facilitar el alcanzar este objetivo”.
En el informe que sirve de base a las discusiones, Ban advirtió de que cerrar o limitar las actividades de la Minurso aumentaría el riesgo de guerra y sentaría un precedente negativo. Fuera de la crisis abierta entre la ONU y Marruecos, el texto recupera buena parte del lenguaje de años anteriores y pide a las partes que negocien para lograr una solución “duradera y mutuamente aceptable, que dé la libre determinación al pueblo del Sáhara Occidental”.
El proceso diplomático está actualmente bloqueado, pues mientras el Polisario reclama avanzar hacia un referéndum de autodeterminación, Rabat sostiene que la única base para negociar debe ser su propuesta de autonomía para la ex colonia española.