El eco de la “manifestación más grande de Europa” a favor de los refugiados que recorrió Barcelona el pasado fin de semana ha retumbado este domingo en más de 30 ciudades españolas.
Bajo el lema “No a la Europa fortaleza. Acogida ya”, la convocatoria se ha extendido a ciudades como Madrid, Alicante, Donosti, Fuerteventura, Pamplona o Salamanca, que también se han unido a la protesta. Desde primera hora de la mañana, centenares de manifestantes ya habían recorrido las calles de Valencia, Oviedo, Logroño, Gijón, Zaragoza o Sevilla para exigir a las autoridades “rutas seguras” para las personas migrantes y refugiadas. Y que también se acelere su acogida.
En Madrid, a pocos metros de la emblemática Plaza Mayor, unos cientos de personas gritaban consignas como “la Unión Europea, responsable y criminal”, “queremos acoger a las refugiadas” o “ningún ser humano es ilegal”. En el centro de la plaza, frente a la entrada del Ministerio de Exteriores, se desplegaron pancartas que rezaban “Pasaje seguro ya” o “No solo bienvenida, queremos acogida”. Además, se colocaron maletas con mensajes pintados, tan contundentes como “Madrid quiere acoger”, “En mi casa sí” y “Acabemos con la vergüenza”.
Un grupo liderado principalmente por jóvenes africanos han coreado “¡boza, boza!”, el grito de victoria que suena en Melilla o Ceuta, cada vez que alguien consigue atravesar la valla de la frontera sur.
“Estamos aquí simplemente por la dignidad humana. Si decimos ‘no’ a las políticas migratorias de Donald Trump, vamos a decir ‘no’ a las políticas migratorias de la UE y de España, que están en las vallas de Ceuta y Melilla”, dice Mahamadou Simakha, un joven maliense que llegó a España hace tres años.
Napuli Paul, un joven de Sudan del Sur y afincada en Alemania, participó en el encuentro, aprovechando la visita a Madrid, junto con otros compañeros de diferentes nacionalidades “para crear una conexión y una red de apoyo en todos los países, entre inmigrantes, frente a las políticas migratorias en Europa”. Holanda, Italia o Dinamarca son otros de los países que recorrerán próximamente con el fin de estrechar lazos en una tierra de fronteras.
“Hay que apoyar este tipo de concentraciones, por la situación que están viviendo miles de personas de Siria y otros países. Hay 65 millones de refugiados en el mundo, tenemos que estar a la altura, con lo que se supone que es el espíritu europeo de estar abiertos al refugio”, explicaba Yolanda, una de las asistentes, quién también lamentaba que “el Gobierno sólo ha acogido a mil personas, de las más de 15 que se comprometió”, y lo califica de “injusto”.
Justo hace un año se celebró una cita similar frente a la sede de la Unión Europea en Madrid para pedir vías seguras de entrada para quien huye de la guerra o el hambre en busca de refugio en Europa. Días más tarde, entró en vigor el célebre acuerdo entre la UE-Turquía, una medida contraproducente para la seguridad y necesidades de los refugiados.
La manifestación ha intentado ser interrumpida por un pequeño grupo de neonazis del Hogar Social Madrid. En un gesto que ha sido rechazado por la mayoría de los asistentes, varios de los integrantes del grupo ultraderechista han escenificado una ejecución del Estado Islámico. En una de las pancartas que portaban se podía leer: “Mientras, España se empobrece y Siria se desangra”.
Poco tiempo después, los agentes de la Policía que se encontraban en el lugar han decidido expulsarles de la concentración.
“Queremos acoger”
Durante la mañana del domingo, las imágenes de apoyo a los refugiados se han ido sucediendo en diferentes ciudades.
Valencia, Oviedo o Logroño han abierto sus manifestaciones con pancartas en las que se podía leer: “Queremos acoger”.
Sevilla, Vigo o Zaragoza tampoco han querido faltar a la cita.