Una de las niñas de Chibok secuestrada por Boko Haram ha sido encontrada por un grupo de vigilantes al noreste de Nigeria, según ha adelantado BBC. La cadena británica indica que la menor ha sido identificada como Amina Ali Nkek, según han confirmado al medio británico varios activistas, y sería la primera chica hallada de las 219 escolares que seguían retenidas por el grupo yihadista desde hace más de dos años.
En abril de 2014, Boko Haram irrumpió en una escuela de Chibok, al noreste de Nigeria, y se llevó a 276 niñas. Algunas de ellas lograron escapar en las horas posteriores al secuestro, pero bajo su poder quedaron 219 menores. El hallazgo de esta joven es el primero de estos dos años en los que las menores han permanecido retenidas.
Un portavoz de los padres de las estudiantes ha confirmado también el hallazgo de la joven, según publica The Independent. Ayuba Alamson Chibok, un líder comunitario en Chibok, ha afirmado a la agencia AFP que la joven “se ha reunido con sus padres, que han identificado a su hija antes de que fuera llevada a la base militar de Damboa”. Yakubu Nkeki, portavoz de los padres de las escolares de Chibok raptadas, ha confirmado también a la agencia la identidad de Amina, que tenía 17 en el momento de su captura, apuntó.
La chica ha sido localizada en Mbalala, al sur de Chibok, por una patrulla de civiles armados –Civilian Joint Task Force (JTF)–, que lucha contra la violencia de Boko Haram al noreste del país, indica BBC.
Poco antes del segundo aniversario de su captura, el grupo terrorista difundía un vídeo en el que mostraba a algunas de las niñas secuestradas hace dos años. En él, varias de ellas decían su nombre y aseguraban que se encontraban bien el día de la grabación, en diciembre de 2015. Tres de las madres de las escolares secuestradas afirmaron haber identificado a sus hijas en este vídeo.
2.000 mujeres y niñas secuestradas
Amnistía Internacional calcula que unas 2.000 mujeres y niñas han sido secuestradas por el grupo yihadista, que fue considerado el año pasado como el grupo terrorista más mortífero por sus asesinatos en Nigeria, Chad y Camerún.
Las pocas que han logrado escapar de sus campamentos, describen los horrores que deben soportar las mujeres. “Su vida básicamente consiste en limpiar armas, cocinar, tener hijos y ser violadas. También tienen que leer y estudiar el corán. La mayoría de las cristianas han tenido que convertirse”, explicaba a este medio la periodista nigeriana Chika Oduah.
Fati -nombre ficticio-, una de las pocas chicas raptadas por los terroristas que logró escapar explicó a la CNN en una entrevista que las menores son utilizadas en los atentados. Algunas de ellas se prestan a llevar una bomba solo para escapar del cautiverio. “Era porque querían escapar. Si se involucraban en el ataque suicida, quizás se encontrarían con algún soldado al que poder decirle 'llevo una bomba encima' para que la desactivasen. Quizás, podrían escapar”, contó la joven.