La Eurocámara quita el 'patrocinio de retorno' en su propuesta para negociar el pacto migratorio

El pacto migratorio se le resiste a la UE desde hace años. Con cada tragedia, los líderes de los 27 insisten en la necesidad de avanzar en esa legislación, pero lleva tiempo estancada. Ahora el reto que se ha marcado Bruselas es que se apruebe en los próximos meses, antes de las elecciones europeas de 2024. España aspira a que el acuerdo pueda tener su firma en la presidencia rotatorio que asumirá el próximo semestre. Por el momento, el Parlamento Europeo ha adelantado a los gobiernos al fijar la que será su posición negociadora en los conocidos como 'trílogos', las conversaciones entre la Comisión Europea, el Consejo de la UE y la Eurocámara.

Los eurodiputados han dado luz verde a la posición que defenderá sobre las cuatro propuestas que hizo el gobierno comunitario de cara a la futura política de migración y asilo del viejo continente. La Eurocámara tratará de suavizar las posiciones más anti-inmigración al rechazar como punto de partida los denominados 'patrocinios de retorno' con los que Bruselas diseñó una solidaridad flexible y a la carta para que algunos países fueran los que acogieran y otros los que pagaran. Cedía así el gobierno comunitario las posiciones de los países que rechazan la acogida de refugiados.

Lo que sí mantienen es el concepto de 'contribuciones voluntarias a la solidaridad ' para los países con una mayor presión migratoria, así como el reparto. La Comisión se encargará de hacer un informe de situación anual que señalará las necesidades y permitirá establecer los compromisos de reparto. El eurodiputado del PSOE Juan Fernando López Aguilar, ponente del Reglamento frente a situaciones de crisis, ha abogado por la reubicación de los migrantes entre Estados miembros en ciertas situaciones y se ha referido específicamente a las operaciones de salvamento y rescate en el mar que la UE ha eliminado. “Es un mecanismo que nos gustaría ver en marcha (a nivel europeo). No como primera respuesta pero si como última”, ha señalado en una rueda de prensa.

La intención de los eurodiputados es simplificar y acortar los procedimientos de reclamación de asilo para que se lleven a cabo en un plazo de doce semanas. Igualmente, propone que, en caso de rechazo de la petición, se proceda a la devolución en tres meses. Bruselas está poniendo el foco precisamente en el retorno de las personas que no reciben el estatus de refugiado dado que los porcentajes son muy bajos y la presión de los países más duros con la inmigración se está imponiendo.

“Una vez adoptadas, las propuestas darán lugar en la práctica a detenciones masivas sistemáticas en las fronteras exteriores. Incluso los niños de hasta 12 años pueden ser detenidos en la frontera bajo ciertas circunstancias”, denuncia la eurodiputada de la izquierda Cornelia Ernst (Die Linke). “El reglamento de asilo propone que se interne a las personas migrantes en grandes campos de detención durante al menos tres meses, lo cual supone la cancelación de facto del derecho al asilo y, por tanto, la cancelación de un derecho fundamental”, agrega Sira Rego (IU).

La Eurocámara exige que los países establezcan mecanismos de supervisión independientes para garantizar el respeto de las normas internacionales y europeas sobre refugiados y derechos humanos. También apuesta por la “cooperación” con terceros países para evitar los flujos irregulares.

“Nuestro grupo ha logrado algunas mejoras respecto a la propuesta de la Comisión, como un mecanismo independiente de vigilancia para el cumplimiento de los derechos humanos o del sistema de Dublín, que actualmente deja a algunos estados miembros una responsabilidad desproporcionada, y respecto a la solidaridad, incluyendo la reubicación obligatoria en vez de externalizando la responsabilidad a terceros países”, expresa Tineke Strik , de los verdes, que advierte de que no pueden apoyar la “tendencia actual hacia la detención generalizada”.: “Lamentamos que las personas migrantes continúen sufriendo el movimiento renovado hacia la construcción de la Europa Fortaleza”.

“El principal objetivo de esta regulación es reforzar la confianza mutua entre estados miembros y conseguir una verdadera solidaridad y responsabilidad justa compartida dentro de la UE”, ha afirmado el sueco Tomas Tobé, del PP europeo. Todos los ponentes, así como la presidenta de la Eurocámara, Roberta Metsola, han apremiado al Consejo de la UE a fijar su posición para que las negociaciones puedan comenzar.

La negociación del pacto migratorio no será fácil y en las últimas fechas los países con planteamientos más duros contra la inmigración han ido ganando posiciones al presionar con propuestas como las plataformas de migrantes en terceros países, que ya fue rechazada en el pasado, o la financiación de vallas y muros con presupuestos de la UE. Un discurso al que se ha sumado el PP europeo.