El Ministerio de Trabajo ha aceptado cuatro de los siete espacios propuestos por el Ayuntamiento de Madrid para dar respuesta a las decenas de solicitantes de asilo que están pasando la noche a la intemperie frente a la sede del Samur Social. Tras visitar los edificios municipales, el equipo técnico de la Secretaría de Estado de Migraciones ha anunciado la apertura “inminente” de un centro en Cercedilla, mientras que los otros tres espacios aprobados requerirán la adecuación previa de sus instalaciones.
Según han confirmado fuentes del Ministerio de Trabajo, este lunes la Secretaría de Estado de Migraciones visitó, junto a los servicios técnicos del Ayuntamiento de Madrid y Cruz Roja Española, “los siete espacios propuestos por el Consistorio para dar acogida a solicitantes de Protección Internacional”. Tras la inspección de las edificaciones ofrecidas, el Ejecutivo ha concluido la validez de cuatro de ellos.
Estas cuatro ubicaciones que el Ministerio estudia transformar en centros de emergencia, de las siete propuestas por el Ayuntamiento, albergarían 635 plazas nuevas para refugiados y solicitantes de asilo. Aunque no todas están preparadas para ponerse en marcha de inmediato.
Solo uno de los espacio, ubicado en Cercedilla, “puede entrar en funcionamiento de forma inminente para atender a estas personas”, recalca el Ministerio.
El segundo espacio está localizado en uno de los edificios de la Casa de Campo, pero antes de ser transformado en un centro de acogida requiere “la habilitación de las instalaciones” que, según asegura el Ministerio de Trabajo, “depende del Ayuntamiento”.
Además, desde la Secretaría de Estado también han encargado un informe técnico para “evaluar la viabilidad de dos de los antiguos colegios”, incluidos en la lista de opciones enviada por el consistorio. Estos espacios “requieren de una serie de adaptaciones” que, de llevarse a cabo, serían financiadas por Trabajo.
“Buenas noticias” para el Ayuntamiento de Madrid
“El Ministerio se va a dar toda la prisa en resolver esta situación tan problemática, es un punto de partida esencial, que haya asumido al final su responsabilidad”, ha dicho el delegado del área de Familias, Igualdad y Bienestar Social, Pepe Aniorte, que ha calificado de “buenas noticias” este nuevo paso.
Aunque la competencia para acoger a las personas solicitantes de asilo recae sobre el Ministerio de Trabajo y Migraciones, la lista de espera existente para formalizar la solicitud de asilo está dejando a decenas de personas en la calle mientras esperan entrar en el sistema de acogida estatal.
Una vez formalizada la cesión de los espacios por parte del Ayuntamiento y las adecuaciones exigidas, explica el departamento dirigido por Magdalena Valerio, estos “se incorporarán al sistema de acogida de solicitantes de Protección Internacional de la secretaría de Estado de Migraciones”, por lo que la gestión y los gastos derivados de su funcionamiento correrán a cargo del Ministerio de Trabajo.