Tres meses después de que la coalición de grupos armados Seleka se hiciese con el poder en la República Centroafricana, Médicos Sin Fronteras alerta de la situación de emergencia humanitaria en la que está a punto de caer el país. La organización denuncia la “indiferencia” de la comunidad internacional comprobada gracias a su presencia en el terreno, donde MSF ha instalado distintas unidades móviles para hacer frente al desabastecimiento y destrozos sufridos en los hospitales tras el golpe de estado del pasado marzo. El informe 'República
Centroafricana: ¿abandonada a su suerte?' realiza un llamamiento ante la necesidad de una ayuda internacional que, según denuncian, es prácticamente inexistente.