El dueño de Pipas Facundo, amnistiado por Montoro: “Que no se dé ni un solo paso atrás en la reforma laboral”
El presidente de la Cámara de Comercio de Palencia y propietario del grupo de aperitivos Pipas Facundo, Vicente Villagrá, que se acogió a la amnistía fiscal de 2012, ha reaparecido para pedir al nuevo Gobierno “que no se dé ni un solo paso atrás en la reforma laboral” que puso en marcha ese año el Ejecutivo de Mariano Rajoy, según informa la Cadena Ser.
Villagrá intervino el jueves pasado por primera vez en un acto público desde que el pasado 14 de junio la investigación Los Papeles de la Castellana, elaborada conjuntamente por las redacciones de eldiario.es, La Marea y Diagonal, a partir de una documentación remitida al buzón filtrala.org, reveló que el empresario y su familia legalizaron un patrimonio opaco de más de 11,2 millones de euros aprovechando la amnistía fiscal que puso en marcha el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro.
En el transcurso de la entrega de los premios anuales de la Cámara de Comercio, Villagrá pidió al Gobierno que refuerce el AVE desde Madrid hasta Palencia con dos nuevas líneas y reclamó que se mejoren las carreteras en la provincia y se impulse de forma definitiva un nuevo hospital para la capital palentina.
Según informa la Agencia de Noticias de Castilla y León, Villagrá reclamó “responsabilidad” al Gobierno y al resto de partidos políticos para “adaptar el empleo a las necesidades empresariales” y advirtió de la necesidad de incrementar la actividad productiva y controlar el gasto para reducir el déficit público pactado con la Unión Europea.
[Vídeo cedido por La Sexta Columna]
Villagrá, cuya dimisión como presidente de la Cámara pidieron en vano PSOE y Podemos tras conocerse que se acogió a la amnistía fiscal, preside ese órgano de representación de los empresarios palentinos desde hace dos décadas, aunque ha anunciado que no va a presentarse a la reelección.
Ahora, ha reaparecido tras un silencio de más de cinco meses para recuperar su habitual discurso a favor de reducir el gasto público, bajar impuestos, abaratar las cuotas empresariales a la Seguridad Social y profundizar “de verdad” en la reforma laboral. “Hemos vivido un 30% por encima de nuestras posibilidades”, aseguró por ejemplo en 2010, dos años antes de regularizar con la amnistía el dinero que su familia tenía escondido en Suiza pagando 337.405,36 euros, el 3% del dinero aflorado.